Estos días tenemos la suerte de disfrutar en Oviedo de una eliminatoria de la Copa Davis de tenis, por lo que aprovechando la circunstancia y gracias a la sugerencia de mi amigo Víctor Cabal, nos servirá para reflexionar sobre el tenis y los Sombreros.
Cuando me puse a pensar en qué contarles se me plantearon dos posibilidades: podemos hablar del tenis y los sombreros desde el punto de vista de los jugadores o del público. Tanto unos como otros utilizan en las competiciones sombreros, gorras, viseras, etc. para protegerse, pero también para lucirlos en el espectáculo que rodea las pistas.
Por lo tanto le dedicaremos dos entradas al tema, y la de hoy será para los tenistas y sus sombreros.
El tenis es un deporte que por lo general se practica en el exterior, con todas las incomodidades que esto supone. Aunque con lluvia el partido se suele suspender, los tenistas sufren las inclemencias del sol, calor y viento. Por lo que las prendas que utilizan para protegerse tienen que cumplir una serie de características muy específicas. Por un lado deben proteger de los rayos del sol y con su visera facilitar la correcta visión de la bola. Por otro, deben tener un tejido absorbente que elimine y transpire la humedad de la frente y cabeza. Y por último, deberán servir como sujeción del pelo para que este no se desplace hacia la cara y moleste en el transcurso del juego.
Todas estas son las características que debe tener la prenda de cabeza con la que el deportista entre en la pista. Hoy en día encontramos en el mercado muchos modelos que cumplen sobradamente con estas características, tejidos con protección solar, ligeros, transpirables y flexibles, que logran que nos olvidemos de ellos cuando practicamos deporte.
En el blog les hemos presentado algún ejemplo de esto, modelos que pueden encontrar en nuestra tienda on-line.
Pero esto no siempre fue así, ni los materiales eran tan sofisticados, ni la preocupación de los deportistas era la misma. Al principio, el aspecto físico y el decoro primaban sobre la comodidad. Por eso he querido mostrarles algunos ejemplos de principios del siglo XX, donde el tenis ya causaba furor, y aunque no todo el mundo se podía permitir el lujo de practicarlo, contaba con un buen número de seguidores.
Veamos algún anuncio sobre la moda en este deporte, y sobre todo fijémonos en los sombreros, modelos con ala que ahora nos serían muy molestos para practicar deporte.
Y vean ahora un anuncio de sombreros para practicar tenis y golf de la época.
Por último, el atuendo completo del deportista, un poco diferente al que podemos encontrar hoy en las pistas, ¿verdad?
Un deporte que, como casi todos, ha cambiado de forma radical con el paso del tiempo, al menos en lo que a la indumentaria se refiere. Pero por muchos años que pasen, el sombrero, o la gorra en este caso, sigue siendo imprescindible.
Este artículo esta dedicado a mi amigo Víctor Cabal, ideólogo del tema. Gracias, Víctor.
Visto en: Sombrerería Albiñana.
Imágenes perteneciantes a la Biblioteca Pública de Nueva York.
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