Revista Cultura y Ocio

Teo

Publicado el 18 abril 2020 por Plasnisk

Teo

Teo

Teo fue un pelirrojo de sonrisa permanente, peto naranja y pupilas del tamaño de los ojos que se ha movido más que el baúl de la Piqué.
En sus últimos días estaba más colgado que cuando se colgaba de la O en la portada de sus libros.
Quizá lo conozca por sus éxitos como «Teo se viste», «Teo va al parque» o «Teo va al baño de las niñas porque resulta que el otro estaba ocupado».
Biografía

Teo

Alguna borrachera y
Posterior resaca

Cuando era un niño tuvo una infancia normal y corriente.
Alguna que otra perrería, pero en todo caso serían faltas leves cometidas hace años y que, por lo tanto, habrán prescrito.
Tenía una existencia alegre, curiosa y feliz.
Todo iba bien hasta que un buen día su padre, que era moreno se dio cuenta que su mujer era rubia.
Entonces se dio cuenta que aquel vecino pelirrojo de tan buen ver, había taladrado a su mujer.
Una noche, llegó antes de trabajar y ante un ataque de celos, mató a su mujer a golpes, con El país semanal enrollado y luego se quitó la vida arrojándose por la ventana. Una ventana que estaba cerrada, por cierto.
Todos aquellos hechos se recogieron en el libro Teo presencia el asesinato de su madre y el suicidio de su padre.
Tras la muerte de ambos, la custodia de Teo y sus hermanos fue a parar a manos de sus abuelos.
La cosa fue bien la primera semana. Cuando los servicios sociales dejaron de monitores, la cosa cambió
Los tres hermanos fueron encerrados en el sótano. Fueron maltratados física y mentalmente.
Apenas comían y se tenían que alimentar chupando las humedades y bebiendo sus orines.
Meses después sus hermanos murieron de hambre.
Un día logró escapar en un despiste de su abuelo.
Aquella aventura se registró en El cautiverio de Teo y su hermanos.
Decadencia

Teo

Todo mito tiene su
Caida

Tras escapar de su cautiverio, tuvo que vivir en la calle mendigando y comiendo de la basura, incluso prostituyéndose.
La cosa fue degenerando de tal forma que acabó varias veces en la cárcel por narcotráfico.
Uno de sus clientes lo metió en bandas juveniles. Fue poco a poco convirtiéndose en la mano derecha de un mafioso, el cual le encomendó tareas de extorsión a varios comerciantes.

Teo

La carne es débil

Fue ascendiendo poco a poco a base de cargarse a sus rivales en el hampa hasta llegar a ser El padrino.
Acabó en la cárcel por tantos cargos que no cabrían en este artículo. Casi todos los que constan en el código penal.
Aprovechó que un partido progresista entró en el poder y escapó en el primer permiso penitenciario.
A partir de este punto hay dos teorías: la primera dice que allí se embarcó como polizón en un barco del que posteriormente se tiró al ser descubierto cerca de las costas de Irlanda. A partir de ahí se perdió su pista, y se cree que pudo morir de frío o ahogado en esas aguas.
Realmente estaba viviendo en una alcantarilla. Todo aquello se recogió en Teo elude la ley.
Los dos últimos libros de la saga fueron Teo se muere y Los familiares de Teo piden la eutanasia.

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