Teoría de las Inteligencias Múltiples

Catalogar hoy en día a alguien de inteligente o no inteligente es algo muy abstracto y demasiado generalista. Ya no es suficiente y es que según importantes estudios se ha descubierto lo que ya estaba sobre la mesa: los humanos tenemos y gozamos de diferentes tipos de inteligencia y tener una de ella o varias no implica tenerlas todas ni de hecho, al mismo nivel. De esta conclusión se dirime la Teoría de las Inteligencias Múltiples a través de la cual podemos vislumbra un poco más sobre las inteligencias existentes, cuáles son, qué implican y a partir de ahí, desarrollarlas.

No solo una inteligencia

El ser humano se compone de diversos tipos de inteligencia dependiendo de múltiples factores en los que se aplique. El paradigma de la Inteligencia Única por lo tanto ya no es aplicable o estaría desfasado a partir del lanzamiento de la Teoría de las Inteligencias Múltiples.

Una teoría (la de las Inteligencias Múltiples) realizada por Howard Gardner, psicólogo estadounidense que si bien evita la contradicción con la definición puramente científica de la Inteligencia Única, viene a añadir otras aristas a la misma ampliando así el concepto.

Si atendemos a la definición de inteligencia veremos que esta se refiere estrictamente a “la capacidad de solucionar problemas o elaborar bienes valiosos” pero ¿es suficiente esta definición para entender y sobre todo, definir la inteligencia de una persona? La respuesta es no y sobre esto se basó Gardner y su equipo de Harvard para su estudio.

Inteligencias Múltiples

¿Qué son en realidad las inteligencias múltiples? Son los diferentes tipos de inteligencia que puede tener una persona según la investigación de Howard Gardner. En su análisis, el investigador detectó, identificó y clasificó hasta 8 tipos de inteligencia y añade que unas no son excluyentes de otras ni obligatorias (es decir, que se puede tener unas sí y otras no).

Eso sí, puntualizando: todos tenemos todas las inteligencias de forma innata lo que ocurre es que unos desarrollamos más unas que otras y además, en nosotros mismos destacan más algunas.

Inteligencia lógico (matemática)

Esta fue considerada durante largo tiempo como “la única” inteligencia, la inteligencia en sí misma. Ser o no inteligente se evaluaba a partir de los criterios de lo que hoy conocemos y definimos como inteligencia lógica – matemática.

Se valora la capacidad innata o desarrollada y perfeccionada para resolver problemas matemáticos – lógicos, la rapidez mental, etc. Se evalúa de forma más ágil que las demás quizás gracias al desarrollo de test de coeficiente intelectual.

Inteligencia espacial

Tener la capacidad de identificar y ver los objetos en diferentes perspectivas se considera tener desarrollada la inteligencia espacial. Es propia de los pintores, arquitectos, creados pero también y aunque parezca extraño, en los taxistas que necesitan de algo más desarrollado para aventurarse en las ciudades y conocer sus planos de planta a través de sus calles.

Inteligencia lingüística

Personas con extraordinaria capacidad para dominar el lenguaje y la comunicación. Es algo que aplica por igual a todas las culturas y que hace que podamos llegar con nuestro mensaje, ya sea oral – corporal – escrito a todos nuestros públicos objetivos. Dícese de pintores, escritores, políticos, periodistas…

Inteligencia musical

Grandes y con mucha inteligencia (pero no cualquier inteligencia) la que tienen los que manejan con supremacía un instrumento. Y es que como sabemos, a no todos se nos da bien esto de tocar el violín o el piano. La música hay que entenderla y ese “sexto sentido” que algunos tienen es el desarrollo de esta inteligencia que puede trabajarse y desarrollarse con esfuerzo y tenacidad.

Inteligencia corporal y cinestésica

Todos los que utilizan herramientas con maestría se dice que tienen la inteligencia corporal o cinestésica muy desarrollada. Y es que para ello hay que tener una percepción del cuerpo muy elevada y bien situada en nuestro conjunto.

Inteligencia intrapersonal

Estar y entender a uno mismo. Saber cómo gestionar y manejar nuestras emociones, lo que sentimos, lo que nos ocurre. Qué importancia tiene esta inteligencia y es que a menudo estamos muy desconectados y no sabemos como tratarnos a nosotros mismos.

Quien tiene esta inteligencia muy desarrollada es capaz de analizar sus emociones, interpretar cómo les está afectando y toma decisiones acertadas sobre el devenir de su vida a través de la introspección.

Inteligencia interpersonal

Captar cosas y situaciones de otras personas que nuestros sentidos no alcanzan a identificar. Detectar y saber qué significan unos gestos, un movimiento, las metas de un discurso… En definitiva, la empatía que todos deberíamos tener desarrollada y trabajada para entender al otro.

Inteligencia naturalista

Con esta inteligencia podemos detectar detalles del entorno, relacionarnos con animales e incluso, entender y aceptar fenómenos de la naturaleza como el clima, la geografía, etc.

*Esta inteligencia fue un extra añadido posteriormente al estudio original sumándose en el año 1995 y es que se consideró que era una inteligencia muy necesaria e imprescindible para el desarrollo del ser humano en nuestro planeta.

Importancia de las inteligencias diversas

Según Howard, ninguna de las inteligencias descritas son más importantes que otras, en términos generales. Si bien es cierto que dependiendo de la actividad profesional y/o de vida de cada individuo, puede ser de más utilidad una u otra.

Es necesario para una vida saludable tener al menos, todas las inteligencias mínimamente desarrolladas. Así nos garantizamos tener cobertura en todos los aspectos de vida. En la escuela nos enseñan a desarrollar las inteligencias lingüísticas y la lógico pero el resto, es responsabilidad de nuestra familia, entorno y de nosotros mismos, trabajarlas para conseguir un nivel óptimo. Es importante ir incluyendo en la formación de los más pequeños el desarrollo y empuje del resto de inteligencias sobre todo, la emocional que nos ayudará a tener mejores relaciones con nosotros mismos y los demás.

Es posible trabajarlas y potenciarlas para tener un mayor y mejor escenario de desarrollo y relación con los demás. El coaching puede ayudarte a establecer el camino para cada una de estas inteligencias ¿Hablamos?