Revista Mundo vegetal
The Alnwick Rose (David Austin, 2001) es uno de los arbustos que rodea el huerto. Forma una mata erecta, de más o menos 1'5 m de altura, y florece con profusión. Además de dos buenos despliegues en primavera y otoño, se puede observar siempre alguna flor en la mata. Por su estructura, es recomendable como rosal de arriate, y tiene el plus de que resiste muy bien las inclemencias meteorológicas.
Las rosas tienen una forma muy agradable, con al menos tres estadios bien definidos: comienza siendo una bola de pétalos amplios, y va abriéndose poco a poco, dejando ver unos pétalos interiores más cortos, al estilo roseta, hasta quedar abierta por completo y enseñar un pequeño botón amarillo. La cara interior de los pétalos es rosa madreperla, y, la exterior es un tono más subido, en rosa porcelana. El interior tiene toques asalmonados.
Según Austin, el aroma es "de buena rosa antigua con un toque de frambuesa". Personalmente, encuentro un aroma medio, y fresco. No sabría decir si a frambuesa, pero sí se percibe el afrutado :).
El Castillo de Alnwick data de más de 1.000 años de antigüedad, y desde hace 700 pertenece a la familia Percy. Actualmente, el castillo está abierto al público y vinculado a obras benéficas, es una manera de financiar su mantenimiento, aunque está habitado por sus dueños, el Duque y la Duquesa de Northumberland. El edificio alberga numerosas colecciones de arte y varias películas se han rodado allí (Harry Potter, Elizabeth...). La Duquesa de Northumberland inició hace 10 años la construcción de un jardín contemporáneo, que cuenta con varios espacios muy interesantes, entre ellos, una rosaleda que alberga una sustancial colección de rosas inglesas. Esta rosa, The Alnwick Rose, conmemora este nuevo jardín.
"Una rosa es una rosa es una rosa". Gertrude Stein.