Revista Cine
Director: Irvin Yeaworth
Qué sorpresa ver al bueno de Steve McQueen en una película como esta. Era de sus primeras películas. Tenía casi treinta años y le toca hacer de adolescente; la verdad es que resulta divertido. Además, no me había fijado en el parecido que comparte con Michael Shannon. No dejaba de pensar en aquello.El caso es que "The Blob" es una película en donde Homero Simpson se transforma en una masa devoradora gigante, de apetito voraz, que se traga todo lo que tiene a mano (incluido al Dr. Phil), aniquilando así a la población de Springfield. Fuera de bromas, Steve McQueen y su novia ven caer una especie de meteorito cerca de los miradores en donde intentan hacer cosas de adolescentes. Del meteorito sale una masa que no tarda en comenzar a devorar todo cuanto se le cruce, creciendo exponencialmente con cada nuevo bocado. McQueen y su novia intentan prevenir a los demás del terrible hallazgo. Nadie en el pueblo les cree y, mientras la masa se come a los incautos habitantes, McQueen y su novia intentarán enfrentar, ahora por su cuenta, la obesa amenaza. No vamos a hilar fino: la película es entretenida y cumple lo que promete, que es, me parece, mostrar un pedazo de masa comiendo personas. No quiero pasarme de listo, pero en algunas escenas "The Blob" tenía interesantes retazos de body horror, aunque más bien sólo al inicio, cuando la masa deformaba por completo el cuerpo de su primera presa, un pobre y solitario paleto al que le sobrevivió su fiel perro. Sí destacan los efectos especiales/visuales/prácticos de la masa, que logran otorgarle "vida", la sensación de movimiento, de autonomía al bicho informe ese. "The Blob" también se aprovecha un poco de la onda/estética de "cine de adolescentes" de la época, aunque no tan oscura ni violenta ni descarnada ni desencantada como "Rebelde sin causa", "Crime in the Streets" o "The Delinquents", que ponen el foco en la delincuencia juvenil de manera cruda y sucia (imagino que en los 50 debió ser todo un lío, para que hicieran tantas películas... más o menos como con el cine de gángsters en los 30). Acá los muchachos pendencieros solamente le gastan inocentes e inocuas bromas a los policías y se quedan despiertos hasta la madrugada viendo las funciones de medianoche de los cines; la verdad es que de violentos y perdidos y desesperados estos muchachos tienen bien poco (mi dedo meñique tiene más perversidad que todos esos pelafustanes futres juntos), pero claro, estamos hablando de una película de terror retocada con trazos de comedia. El caso es que, sin tener grandes personajes ni escenas muy memorables ni una historia precisamente cuidada, "The Blob" de todas formas se las arregla para ser una película de terror suficiente y estimablemente correcta, funcional, a fin de cuentas, un sano divertimento para disfrutar sin expectativas muy elevadas. Ya se dijo: cumple lo que promete. Fin de la función.Eso sí, Steve McQueen tiene un interesante monólogo situado más o menos en la mitad del relato, cuando se pone medio existancial y metafísico para sus cosas. En realidad es un muy buen monólogo, totalmente inesperado, y dice cosas que no hay que mirar a huevo. Atención a ello.Lo llamativo del final es la frase que se marca McQueen, más o menos así (me ahorro el contexto para no arruinarles el desenlace de la trama): "...seguro, siempre y cuando el ártico siga siendo frío" (también podría servir "...mientras el ártico siga congelado", pero suena a mala traducción). Luego la película misma te pone un signo de interrogación sobre una imagen del ártico. Me pregunto si es una suerte de guiño al cambio climático o algo por el estilo (¿tenía, por entonces, dicho concepto la misma urgencia que actualmente?; ¿existía siquiera?), o si, por el contrario, no es más que una manera de jugar con el público, así como si le estuviese sugiriendo la existencia de una secuela. A estas alturas nunca lo sabremos... Sí sabemos que hubo una secuela quince años después (al parecer pasó con más pena que gloria, si es que alguien se enteró de su estreno) y que hubo un remake treinta años después. Del remake hablaremos dentro de poco. Todavía nos queda una película de ciencia ficción-terror de la época por ver, antes de dar el salto a los aparentemente sempiternos ochentas.En fin... "The Blob": película para relajarse y divertirse un buen rato, y para ver a McQueen en un registro algo atípico en él (si es que antes ya se le han visto sus otras películas más emblemáticas, claro).