Pues eso, que estaba servidora hasta el moño y más allá y necesitaba alguna serie que cumpliera unos requisitos muy determinados. En corto y por derecho, que me distrajera y no me hiciera pensar. Probé con Houdine & Doyle que tenía todas, pero todas, las papeletas para congraciarse con mi espíritu. Pues no, nada. Por mucho mago, mucho escritor y mucho Londres decimonónico, aquello no hay por donde cogerlo y la serie aburre a las telarañas. Una pena. Además, me hacía pensar y ya hemos dicho que necesitaba algo de electroencefalograma plano, neuronas a dormir y a mí déjame de rollos fantasmagóricos y misterios. He dicho algo que NO me haga usar el cerebro. Cooo...ncho.
Y entonces llegó Shonda y estrenó The Catch. Y fui feliz. Porque es la serie ideal, perfecta para mi estado mental de ameba recién despertada. A saber:
- Las protas llevan ropa cara, buena, que se le ve la calidad y la caída, con unos bolsos que da gloria verlos. Así enchufo el modo Vogue en mi cabeza y me lo paso pipa. I'm a material and poor girl in a material world. Jopetas.
- La prota-prota lleva unas pestañas postizas que cuando cierra los ojos se hace de noche. Una cosa MUY loca pero que te tiene todo el capítulo pendiente de si ese seto matoso aguanta ahí o aparece enganchado en la corbata del churri o en el vaso de café de algún compañero, en plan añadido nutritivo new age de los que saca Gwyneth Paltrow en su blog.
Sí, chata, sí, exagerado lo tuyo....
- La prota y su colega son detectives privados en Los Ángeles. Son las mejores en lo suyo (OF COURSE) y tienen clientes mega-super-que-te-pasas-millonarios que acuden en su busca desesperados con problemas SUPER GORDOS que nuestras amigas resuelven en un abrir y cerrar de ojos pestañosos. Los casos suelen ser paridas tan grandes que una persona normal sabe la solución al minuto uno. De ahí que diga que esta serie no hace pensar. Como ya sabes lo que va a pasar, te puedes centrar en si se cae o no la pestaña o en qué vestido tan mono lleva esta
- Todo es mega bonito y muy millonario, nada de cosas de pobres, quita. La prota inicia la serie con una frase muy mítica que da cuenta del ritmo del asunto: "oh, se ha llevado todos mis ahorros.... 1,4 millones de dólares". QUÉ DRAMA.
- La serie se llama The Catch porque aquí a Lady Seto Matoso Ocular el novio le hace una tres catorce y en vez de ser el príncipe azul que ella se pensaba resulta que es un Urdanga de manual. Un estafador, pero, eh, eso sí, con buen corazón y sentimientos verdaderos, que una cosa no quita la otra. Te dejo sin dinero para mantener esas pestañas pero lo nuestro ha sido de verdad, no te vayas a pensar. Que es que un día tonto lo tiene cualquiera, mujer, cómo te pones.
- La chica, claro, se lo toma malamente y dice que le va a buscar allá donde sea. Que para eso, digo yo, que serán las pestañas, porque ahí dentro cabe disimulado un radar. Anda que no. Y funciona, porque Los Ángeles será muy grande pero Shonda sabe darnos lo que queremos y hace que los protas se encuentren cada dos por tres, con momentos de esos de mucha mirada intensa (seto matosil) y mucho que yo te quería de verdad, gitana.
- Y así, a lo tonto, entre coches caros, ropa de marca, música chula y casas de alucine, Miss Pestañas sufre cantidad y nosotros, que somos así de insensibles, disfrutamos cual gorrino en lodazal.
¿Qué hacéis que ya no la estáis viendo?