The Cured, zombies con remordimientos

La moda zombie no cesa y desde irlanda, David Frayne presenta The Cured, su debut en el mundo del largometraje con un film de infectados distinto a lo habitual. Aunque no es la primera vez que abordan el tema de dotar de conciencia a estos terroríficos seres que ni están vivos ni están muertos, Frayne le da una vuelta más a llave inglesa apretando la tuerca sin pasarse de rosca.

Aunque, el propio George Romero en El día de los muertos ya otorgó el poder de la conciencia a Bub; el zombie, o en La tierra de los muertos a Big Daddy, han sido películas más recientes como The Girl with All the Gifts o Los retornados las que tratan en mayor profundidad el tema de la conciencia en los zombies. Sin embargo, nunca visto desde el punto de vista que ofrece el guión escrito por el propio Frayne.

Hace unos años, el continente europeo se vio asolado por un virus que convirtió a la población en monstruosos caníbales. Se logró hallar un antídoto, pero incluso después de curadas, las personas infectadas recuerdan todo lo que hicieron durante su enajenación. Hoy, la última tanda de convalecientes se prepara para reintegrarse en sociedad.

La película de Frayne crea un dilema moral y conflicto social posterior al suceso de la infección, aunque retrocede en la historia con algunos flashbacks, la película no se centra en el antes, lo hace en acontecimientos posteriores, dando así al conjunto un punto de frescura.

The Cured acude a los remordimientos del ser humano por partida doble. Por un lado, el de los humanos que han sido curados y que se sienten culpables de sus actos durante la fase de infección, pero también posterior. Y por el otro, se quiebra la convivencia y la sociedad en dos bandos, que defienden a los vivos que nunca han sido infectados y los que han sido curados de la infección. De manera que se crea una lucha entre 'razas' por sobreponerse

El reparto lo encabeza Ellen Page, sin duda alguna, un buen reclamo para captar la atención del público entre tanta película de no-muertos. La actriz ha trabajado bajo las órdenes de directores como Christopher Nolan o Bryan Singer, esto ya es motivo suficiente para que la película de Frayne destaque.

Al margen de eso, la actriz sigue demostrando su gran talento en este producto, que no deja de ser una película de terror que se presta a una factura técnica bastante económica. Los principales actores que dan volumen y hacen avanzar la película son Tom Vaughan-Lawlor (Infiltrado) y Sam Keeley (Monsters: El continente oscuro), ambos están muy correctos en su actuación y la relación de amistad, si se puede llamar así, es bastante creíble.

Otro punto a favor, son los efectos especiales, aunque son poco espectaculares son acordes y están bien integrados en una propuesta que apunta por el dramatismo en su tramo final. The Cured es un film, que en mi caso, me ha sorprendido, ya que la idea que plantea su director no la había visto en ninguna película de zombies con anterioridad.