The Dark Knight: Supreme Race, la crítica de cómics de Frank Miller

En todas las formas de arte hay algunas obras fundamentales que actúan como cuencas hidrográficas: puertas reales que conducen a nuevos caminos, nuevas corrientes, incluso nuevas épocas. Más allá de ciertas puertas, ya sabes, no vuelves más, solo tienes que lanzarte hacia delante con toda la fuerza creativa y el coraje que puedas.

Al igual que en 1986, cuando tres obras, en particular, hicieron su debut en el mercado de los cómics americanos y partieron el mecanismo que cambió por completo las reglas del juego, cambiar la percepción de los cómics en la opinión crítica y público: en el orden inverso de la producción somos hablando de MAUS (Art Spiegelman), Watchmen (Alan Moore y Dave Gibbons) y el retorno del caballero de la noche (Frank Miller, Klaus Janson y Lynn Varley).

La historia, que se ha vuelto legendaria, habla de un viejo Bruce Wayne que se ha visto obstaculizado por los muchos años de lucha por la justicia, ya no está dispuesto a usar su capa, derrotado por lesiones físicas y mentales, en una sociedad que ha exasperado tantos aspectos fundamentales de vida, con una opinión pública volátil y un crimen cada vez más desenfrenado. Pero también será una oportunidad para mostrar la fragilidad de una sociedad corrupta y decadente; será una oportunidad para volver a tener esperanza en el mañana; Será una oportunidad para cerrar con un régimen político que incluso ha logrado involucrar al hombre de acero, Superman, para detener el avance de un viejo guerrero, fiel a su misión hasta el final.
Caída y redención: un tema muy querido de Frank Miller que lo ha transformado en una marca propia. El hombre que desafía a un Dios, Batman contra Superman, en una metáfora del choque épico de la destrucción del orden establecido. Virtualmente una revolución.

En 2001 la serie obtuvo una secuela, siempre con Frank Miller en la historia y los dibujos y Lynn Varley en los colores, o The Dark Knight Strikes Again: una historia directamente relacionada con la final de la serie anterior, en la que Lex Luthor es el villano principal. Supes tiene una hija con Wonder Woman, Carrie Kelly se ha convertido en Catgirl y Bats incluso ha formado un ejército. Pasan los años y después de esta larga introducción que llegan a la tercera entrega de la saga Dark Knight de Frank Miller o el caballero oscuro: Etnia Supremo (Dark Knight III: Raza Superior), publicado en Italia por RW León entre 2016 y 2017 y hoy finalmente se reunieron en la edición de lujo de cartón de gran formato.

El regreso de los héroes

Habló mucho de esta nueva serie y, como siempre, todo lo relacionado con el señor Frank, la noticia inmediatamente se ganó el favor de la atención, incluso para el elenco involucrados: Miller a la vigilancia y al tema general, Brian Azzarello en el guión y diálogos, Andy Kubert a los lápices.

Un trío literalmente soñador

Y después de los anuncios, los retrasos y los anuncios, enero de 2016 para que vio la luz del número uno de este tercer capítulo de una saga que aún podría revelar algunas sorpresas.

Después de las vicisitudes de The Dark Knight Strikes Again, nadie ha visto a Batman en Gotham durante 3 años. Hasta que una noche, cuando el hombre murciélago interviene en defensa de un niño negro amenazado por algunos policías. La opinión pública va, literalmente, en éxtasis, pero bajo la máscara es en realidad Carrie Kelly, ex Robin y Catgirl, que después de la captura por el GCPD es salvado por la intervención de la última de Bruce Wayne, que todavía se dedica a la su cruzada a pesar de estar visiblemente envejecido.

Pero la concentración se mueve sobre otra familia, si podemos definirla: la de Superman, Wonder Woman y su hija Lara.

El Hombre de Acero se autoimpuso en la fortaleza de la soledad y rechaza todo contacto con el exterior, casi hibernando en un rechazo perentorio a formar parte de la sociedad. Wonder Woman se dedica a su tierra natal para luchar contra monstruos legendarios, y también se niega a intervenir en los problemas del mundo exterior. Y finalmente Lara, se movió de su patrimonio kryptoniano de semillas y diosa, trabajando con el Dr. Ray Palmer (Atom) para dar la libertad a la gente de Kandor, el último testigo de la civilización de Krypton, miniaturizado y encapsulado en una cúpula por el Brainiac mal .

La imprudencia de los jóvenes: Lara no se da cuenta de las consecuencias de sus acciones hasta que se libera el primer grupo de kryptonianos. Sabremos entonces Quar, comandante militar más bien como Zod con sus desechos ningún momento del equipo: destruye lo que queda de Kandor con sus habitantes, golpea a Atom y decide mover una guerra contra toda la humanidad para dominar el mundo como nuevos dioses

Los esfuerzos de Lanterna Verde son vanos y luego el mismo Batman entiende que los únicos héroes capaces de resolver la situación son Superman y Wonder Woman. Ambos tienen que enfrentar no sólo Quar, sino también su propia hija, lavado el cerebro por completo por el ideal de la superioridad de Krypton y no en todos amable con no sólo su propio planeta de nacimiento, sino también a sus padres.

La guerra resultante involucra a todos los héroes del planeta, una vez reunidos en la Liga de la Justicia de América, bajo la guía del Caballero Oscuro. Superman, al principio poco dispuesto, se unirá a la causa riabbracciando viejo amigo en el encubrimiento, el ahorro de su vida e incluso le curado en una de las piscinas utilizadas por Lazarus de Ra al Ghul para rejuvenecer. Sólo el ataque del kryptoniano y el intento de secuestro de la misma al otro hijo y Diana de daños Supes Temyscira (Nathan), despierta los arroces de protección materna y la antigua furia de la Reina de las Amazonas. quien finalmente decide salir al campo para el choque final.