Presentamos la animación que hizo Rockarte de un disco de la banda estadounidense de rock experimental The Flaming Lips, trabajo publicado en el 2011. Hay que considerar que "7 Skies H3" es una locura de por sí, la única canción de 24 horas de duración, una cosa rara (aunque se compiló como una canción continua de un día de duración, se grabó en piezas separadas de entre 25 minutos y 7 horas) que está incluida en el EP "24 Hour Song Skull". Y no solo en eso esto es una rareza; fue lanzada en una edición limitada de 13 copias, en unidades flash encerradas en... cráneos humanos reales, para Halloween de 2011. Cada calavera costaba 5.000 dólares. Para continuar con la locura, también se creó un sitio web, que transmitía la canción en un bucle sin fin. En el 2014 la banda lanzó 7500 copias de una versión condensada de 50 minutos, separada en 10 temas, en un LP de vinilo translúcido, para luego sacarlo a la venta en CD y digital. Si algo le faltaba a todo esto, era la versión de Rockarte, que la tenemos aquí, en el blog cabeza...Edición Rockarte
Si no podés ver la animación, venite acá:
https://fb.watch/oRGJoIzLs_/He estado escuchando mucho "7 Skies H3" de The Flaming Lips desde el Record Store Day (RSD), y tengo que decir que es probablemente mi lanzamiento favorito de Lips desde "Embryonic". Creo que estoy siendo bastante preciso al decir que me estoy dirigiendo a un grupo de alrededor de 10 personas a las que realmente les importa, pero seguiré hablando de todos modos.
Hubo un momento, hace unos dos años, en el que sentí que los Lips habían agotado su bienvenida de "freak out", llevando el tren psicodélico y sexual al extremo. El truco del tío Wayne se estaba volviendo un poco aburrido, y toda la charla sobre ácido y drogas parecía de mal gusto dado que el arma secreta de Lips, Steve Drozd, era un exadicto a la heroína. Se puede decir con seguridad que sin Drozd, Coyne estaría cortando césped en Norman, Oklahoma para ganarse la vida en este momento, y no reinando como el Rey del Freakdom como lo hace hoy. El álbum "Heady Fwends" de 2012, aunque divertido e interesante en ese momento, no ha resistido la prueba del tiempo, excepto por un par de pistas destacadas. "The Terror" fue un álbum pesado e intenso que se sentía como algo real, pero también parecía que su sangre estaba bombeada con un corazón robótico y no con uno de carne real. Era cerebral, pesado y frío. El EP "Peace Sword" fue un paso hacia la luz, un sonido bienvenido. Pero ahora tenemos "7 Skies H3", el mejor disco que The Flaming Lips ha lanzado en 5 años.
Permíteme retroceder un poco. Esta versión de 50 minutos del RSD 2014 es simplemente un fragmento de casi una hora de la canción de 24 horas que Lips grabó cuando los vaginas de goma y los cráneos de goma que contenían unidades flash estaban de moda. Un truco de freakout tras otro caía de la cabeza de goma de Wayne Coyne, y parecía que sucedía a diario. Cuando surgió lo de la canción de 24 horas, simplemente suspiré y pensé "Claro, lo que sea". Bueno, creo que los Lips pensaron lo mismo y llegaron a la conclusión de que deberían reducir esta aventura musical en porciones no gigantescas. El resultado fue "7 Skies H3". Es esta exploración musical cohesiva de, en mi opinión, alguien perdiendo la cabeza. En ocasiones es melancólico, extraño, atrevido y ruidoso. Siento que es una continuación de "The Terror", pero de manera más humana. Una interpretación terrestre de la perdición y la tristeza. Tiene la vibra de una banda sonora de Giallo. Parte Walter Rizzati, parte Goblin. "7 Skies H3 (Can't Shut Off My Head)" es melancólico con sus sintetizadores y la voz flotante de Wayne Coyne. Son más de 8 minutos de tristeza y belleza. Los Lips no han sonado tan reales en mucho tiempo. "Meepy Morp" suena como una secuencia de sueño hacia otro reino. Lo hermoso de este disco es que todo fluye sin esfuerzo de uno a otro... eso si tienes la versión en vinilo. Esta opinión se basa únicamente en la copia de vinilo. La versión digital, aunque aún captas la idea, no es la misma experiencia. "Riot In My Brain!!" es justo eso. Es una explosión de medidores en rojo, como algunos de los momentos más ruidosos de "Embryonic". Este es probablemente el momento más ruidoso del álbum. Los "7 Skies" regresan hacia el final y terminan con la encantadora "Can't Let It Go", con esa idea musical inicial aún resonando profundamente.
Si este álbum realmente se creó a partir de 24 horas de locura musical, mi sombrero se quita ante la banda por brindarnos algo tan cohesivo, perspicaz y emocional incluso. Sé que la banda parece estar de vuelta en la onda freaky, con el proyecto Electric Wurms, así como el álbum de los Beatles 'Sgt. Pepper' en camino. Esperemos que vuelvan a hacer música más sincera y honesta después de todo eso. "7 Skies H3" para mí es una luz al final del túnel. Un vistazo a la banda por la que me enamoré en "The Soft Bulletin".
Es una lástima que un álbum tan increíble se haya desperdiciado en el capricho de un lanzamiento del RSD. Creo que eso ha minimizado la magnificencia de este disco. Lamentablemente, muchos lanzamientos del RSD tienen la aura de "novedad" y "truco" sobre ellos. Los Lips han contribuido a crear esa aura, también. Pero también han sido defensores de la festividad anual de las tiendas de música. Desafortunadamente, han sido absorbidos por su propio alboroto. En mi opinión, deberían haberse vuelto más globales con el split de Tame Impala y haber hecho de "7 Skies H3" un lanzamiento oficial de Lips. ¿Por qué? Bueno, en primer lugar, cuando vas a una tienda de discos una semana después del RSD y aún hay copias de "7 Skies H3" por ahí, la magia del lanzamiento del RSD parece reducirse y marchitarse. También hace que esos fans que obtuvieron una copia en el RSD sientan que la captura no fue tan especial. Además, y esta es mi opinión personal, los lanzamientos del RSD deberían seguir siendo solo copias físicas. Nuevamente, cuando esos chicos y chicas que esperaron frente a una tienda de discos en el RSD durante horas para obtener un lanzamiento de edición limitada ven ese mismo álbum por el que esperaron tanto tiempo en un sitio de transmisión o en Amazon, tiende a quitarles esa sensación especial. Busqué por toda la ciudad para encontrar una copia de "Heady Fwends". Cuando finalmente lo encontré en la última tienda de discos antes de irme de la ciudad en abril de 2012, estaba emocionado. Era como encontrar el boleto dorado. Luego, cuando lo vi a la venta en Amazon y transmitiéndose en Spotify y Rdio, perdió un poco de su brillo para mí. Incluso me sentí un poco traicionado.
La edición limitada, la rareza de esos lanzamientos, eso es lo que los hace tan especiales.
Pero la razón principal por la que este álbum debería haber sido un lanzamiento oficial y real de The Flaming Lips es porque es demasiado bueno para perderse en el bullicio. Si eres fanático de Lips y disfrutas de poner discos, pero aún no has comprado este álbum, hazte un favor y consigue una copia. Todavía hay muchas por ahí. En los años venideros, cuando la gente mire hacia atrás la carrera de The Flaming Lips con asombro, disgusto e incredulidad, este será el álbum del que hablarán como una joya perdida. Te lo garantizo.
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