The Host: La huésped (Andrew Niccol, 2.013)

The Host: La huésped (Andrew Niccol, 2.013)
Ficha:
Título Original: The Host.
Director: Andrew Niccol.
Guionista: Andrew Niccol.
Intérpretes: Saoirse Ronan, Jake Abel, Diane Kruger, William Hurt, Frances Fisher, Max Irons, Chandler Canterbury, Boyd Holbrook, Andrea Frankle, Scott Lawrence, J.D. Evermore, Erik Beacham, Tatanka Means, Raeden Greer, Marcus Lyle Brown, David House, Jaylen Moore, Shawn Carter Peterson, John L. Armijo, Mustafa Harris, Alexandria Morrow, Phil Austin.
Productores: Paula Mae Schwartz, Stephenie Meyer, Steve Schwartz, Nick Wechsler.
Fotografía: Roberto Schaefer.
Música: Antonio Pinto.
Montaje: Thomas J. Nordberg.
País: Estados Unidos.
Lugares de Rodaje: Nuevo México (Estados Unidos); Louisiana (Estados Unidos).
Fechas de Rodaje: Del 13-02-2.012 al 28-04-2.012.
Año: 2.013.
Duración: 125 minutos.
Edad: No recomendada para menores de 12 años.
Género: Acción, Aventuras, Ciencia Ficción, Romántica, Suspense.
Distribuidora: DeA Planeta, S. L.
Estreno: 22-03-2.013.
WEB Oficial: Web Oficial de la película en España.
Espectadores: 0.
Recaudación: 0 €.
Calificación: 5,981.
Sinopsis:
Nuestro mundo ha sido invadido por un enemigo desconocido. Los seres humanos se han convertido en huéspedes de los invasores, que se han apoderado de sus mentes manteniendo el cuerpo intacto. Casi toda la humanidad ha sucumbido a esta invasión. Cuando Melanie (Saoirse Ronan), uno de los pocos humanos 'salvajes' que quedan, se ve capturada, está convencida de que ha llegado su fin. Wanderer, el 'alma' invasora asignada al cuerpo de Melanie, ya está avisada de las dificultades que implica vivir dentro de un ser humano: las emociones irrefrenables, el torrente de sensaciones, los recuerdos demasiado vívidos... Pero hay algo con lo que Wanderer no contaba: la antigua inquilina de su cuerpo se niega a cederle el control de su mente. Cuando unas fuerzas externas obligan a Wanderer y a Melanie a aliarse, ambas emprenden una incierta y peligrosa búsqueda del hombre al que aman.
Crítica:
25-03-2.013 – ANTÓN MERIKAETXEBARRIA
¡Que vienen los aliens!
Tras amasar una millonada digna de obtener el Guinness de los récords con la serie "Crepúsculo", tanto en el papel como en la pantalla, Stephenie Meyer hace de productora en "The Host: La huésped": versión cinematográfica de su novela homónima, filmada por el aquí confuso Andrew Niccol. Ya la premisa argumental no puede ser más disparatada, centrada en la colonización de los terrícolas por parte de atractivos alienígenas. Que ello incluya la inevitable historia de amor intergaláctica, no hace más que demostrar la longitud de onda en la que se mueve la inefable escritora yanqui.
Lo que nos faltaba, con la inflación de chorizos y 'burrócratas' que padecemos, la llegada de extraterrestres dispuestos a robarnos el alma, clama al cielo. A partir de ahí, desprovista de toda voluntad de rigor, la película resulta un híbrido por culpa de sus rimbombantes pretensiones, de la acumulación desmedida de efectos y de lo dudoso de su escenografía, que incluye secuencias rodadas en el fordiano Monument Valley. Esa voluntad de seducir al espectador poco exigente y oficiar en él un encantamiento facilón, se aprecia en la acumulación de secuencias de acción metidas sin ton ni son.
El gozo en un pozo, porque el producto carece de entidad y los intérpretes -con excepción de la talentosa Saoirse Ronan- aparecen abandonados a su suerte por culpa de la pobre definición de caracteres. Lástima que su máximo responsable no se haya aventurado esta vez hasta las últimas consecuencias en el más allá, en lo incomprensible, en lo que inspira temor. Es como si Niccol quisiera franquear esa puerta que otros -incluido Don Siegel en "La invasión de los ladrones de cuerpos" (1.956)- hicieron sonar bruscamente tras ellos: la puerta de la imaginación, la puerta que produce inquietud, la puerta entreabierta hacia un mundo abocado a un final incierto.