Este próximo viernes 17 de Mayo llega a los cines españoles la nueva película del director de culto, Rob Zombie (icono de la música rock y autor de otras películas de culto), tras su polémico paso por el Festival de Cine de Sitges. La película lleva el título de The Lords of Salem y ha sido producida por Jason Blum y Oren Peli.
Por Javier Parrado
The lords of Salem
Aquelarres, demonios y paranoias
Rob Zombie, el director de la película, nos tiene acostumbrados a unas películas de terror que no a todo el mundo llegan a convencer y esta película sin duda será otra más para añadir a la lista. El que fue director de las primeras dos entregas de la saga Halloween (2007 y 2009) o La casa de los 1000 cadáveres (2003), vuelve a la gran pantalla con una película en la que nos cuenta una historia de brujas y demonios que transcurre en un pueblecito llamado Salem. Situada en Massachusets, la ciudad de Salem fue hace ya tiempo el lugar donde las brujas se reunían para llevar a cabo sus aquelarres en los que realizaban rituales satánicos.
Nada más empezar la película entra en escena la actriz Sheri Moon Zombie. Como se suele decir “rodéate de tus seres más queridos”, y es que Sheri es nada más y nada menos que la esposa de Rob Zombie (para que buscar a una actriz pudiendo enchufar a tu propia esposa) a la que se ya se le vio actuando en todas las películas de su querido marido.
En esta película dará vida a Heidi Hawthorne, una rockera con una larga melena, tatuajes, un buen cuerpo y con problemas con algunas drogas. Ella dirige un programa llamado Salem Rocks en la emisora de radio W/OZ y junto a sus compañeros de trabajo, Herman Salvador y Herman Jackson, forman el llamado Gran equipo H. Serán los encargados de emitir el rock más duro a través de las ondas radiofónicas para el deleite de los habitantes de Salem.
Heidi recibirá una misteriosa caja de madera que contiene un vinillo, enviado por alguien llamado The lords. Lo que parecía que iba a ser alguna canción con la que quería dar a conocer alguna banda resulta ser un disco con música digna del mismísimo inframundo. Al escucharlo en su casa con la compañía de uno de sus compañeros de trabajo, la pobre Heidi sufrirá unas visiones en las que verá uno de los rituales realizados por las brujas.
Desde este punto de la película empezarán a surgir los primeros “sustos” y paranoias para el deleite del espectador. El problema es que peca de topicazos basándose en los típicos sustos de cambio de cámara y fuerte ruido, o con alguna que otra aparición demoniaca de la que casualmente la actriz no se dará cuenta. Casi al final de la película sí se ven algunos demonios y seres deformes quizás no aptos para los espectadores más sensibles. Si lo hubiesen dosificado más durante la película habría generado un poco mas de interés ya que en realidad cuando comienzan a surgir es ya el final del filme.
Otro de los personajes a destacar en la película será Francis Matthias, al que dará vida Bruce Davison. Su trayectoria es bastante desconocida y casi siempre aparece como actor de reparto, con unas cuantas películas solo para TV, y otras como Titanic 2 o Asesinato en 8mm 2 (segundas partes nunca fueron buenas), quizás su papel más conocido actualmente sea el del senador Robert Kelly en X-men y X-men 2.
En esta película Francis Matthias será el escritor de un libro llamado Satanás la última parada: La verdad sobre los juicios de las brujas de Salem el cual durante una visita a la ya mencionada emisora de radio quedara fascinado por un curioso tatuaje que tiene Heidi.
De donde proviene el disco y porque iba dirigido concretamente a Heidi serán algunos de los enigmas que le preocuparán al bueno de Matthias y de igual forma nosotros no los desvelaremos para no chafar la película.
Finalmente, Judy Geeson, con cincuenta años como actriz tanto en el cine como en televisión, interpreta a Lacy Doyle, la casera de Heidi y será quien cierre el círculo de actores principales. Esta entrañable señora guarda otro misterio respecto a la historia de la ciudad junto a sus dos hermanas.
Los decorados de la película son bastante escasos, centrándose sobretodo en la emisora de radio y en el edificio donde vive Heidi. Aparecen otros escenarios a lo largo de la película, como los lugares donde se hacían los rituales o una iglesia. Destaca un teatro donde transcurrirán los momentos más impactantes de la película.
En el apartado de música cabe destacar la canción del satánico vinilo. Aparecen otras canciones famosas como por ejemplo Give it to me baby de Rick James, All Tomorrow’s Parties de The Velvet Underground o el magnífico Requiem de Mozart, que combinado con las escenas finales en el teatro resulta aun más maravilloso.
Por otro lado, la parte negativa se la llevan los actores y es que ninguno de ellos será recordado por sus papeles en esta película. Esto, combinado con que parece ser que para Rob Zombie cada pocos segundos se debe cambiar de escena o ángulo e incluso de personaje, no deja casi al espectador fijarse en los pequeños detalles de la película ni en la interpretación de los actores. A veces te hará pensar que necesitas un respiro para poder disfrutarla.
La escena más inapropiada de la película transcurre durante esos momentos finales de paranoia en los que se ven sin ningún tipo de censura y en perfecto primer plano a varios curas con un rostro demacrado masturbándose mientras contemplan como la protagonista se agita encima de un carnero con largos cuernos representando al diablo. Otras grotescas imágenes irán sucediendo para el deleite o asco -según se mire- del espectador.
Si eres una persona de estomago frágil, asustadizo o de los que se trauman fácilmente con escenas de gore de las que te puedan quitar el sueño deberías evitar ver esta película. Destinada más bien a “perturbar” o hacer que el espectador sienta asco gratuito de la forma que sea no es ni mucho menos una película de terror y miedo como se podría esperar.
Advertimos a los espectadores que tras aparecer en pantalla el nombre de los productores y demás, comenzará de forma narrada y a modo de noticia radiofónica lo que sería el epílogo de la película. Si aguantasteis hasta el final de la película y queréis saber qué es lo que pasa deberéis estar sentados un par de minutos más.
+ El tema de las brujas y los demonios. Se agradece la temática dado que parecía olvidada.
- Poco equilibro en lo que a gore / miedo se refiere.
- Fondos en negro y letras blancas aparecen durante la película, indicando el día de la semana en que transcurre la escena al más puro estilo El resplandor, película a la que ya le gustaría parecerse en algo más.