THE WALKING DEAD (Reseña de la cuarta temporada)

Bueno, gente, la temporada de The Walking Dead ha terminado y nos toca como sabéis reseñarla. En líneas generales creo que ha sido una buena temporada, que ha respondido a las demandas de los fans en algunos aspectos, como el de cerrar (y bien cerrada y a lo grande) la trama del gobernador, que a muchos ya se les estaba haciendo larga. Pero en otros aspectos, la serie sigue acusando algunos fallos que la gente también apunta, y de los que me hago eco, siendo el principal que la trama va bastante más lenta de lo que sería deseable en una serie de este estilo, problema que ha sido, al menos en mi opinión, especialmente grave en los primeros capítulos de temporada, y en la segunda parte, cuando la serie regresó de su descanso navideño. Creo que esto se debe sobre todo al número de capítulos por temporada: 16 son demasiados, y hay que estirar las tramas demasiado y meter demasiado relleno (que si la plaga de gripe al principio, que si la separación del grupo que no se reúne hasta el final...) y es por eso que la serie acusa cierta lentitud que hace que, aunque es muy buena y además bastante leal al comic en el que esta basada, muchos espectadores se están echando para atrás y la están abandonando. Creo que sería una buena idea volver a reducir el número de capítulos para agilizar las cosas y no meter tanta paja, 10 o 12 por temporada por ejemplo estaría muy bien. Daría tiempo a desarrollar las tramas y a que salgan todos los personajes, y habría más acción y menos rollo. Dicho esto, pasamos a ya a la reseña en más profundidad, con su pequeño resumen, y su análisis de lo bueno y de lo malo que ha tenido esta temporada.
Como ya he mencionado, la temporada ha tenido dos partes bastante diferenciadas. En la primera de ella, tuvimos un pequeño preludio en el que la tranquila vida del grupo de supervivientes en la prisión era asaltada por una misteriosa epidemia, algo similar a una fuerte gripe o neumonía, que acababa con las vidas de muchos de los que llegaron de Woodbury en aquel autobús (en su mayoría ancianos y niños) Conocemos a dos nuevos personajes infantiles, las hermanas Lizzie y Mika, de las que Carol se hará cargo. Una vez estabilizada la epidemia, en la prisión no bajan la guardia, ya que el Gobernador sigue con vida y podría atacar en cualquier momento. Cuando al fin vemos en que anda nuestro villano, su trama nos conecta con el libro oficial del Gobernador, si bien lo que sucede y su encuentro con los personajes que aparecen, en el libro tiene lugar antes de que llegue siquiera a Woodbury. Interesante también que tengamos la confusión de nombres entre Philip y Brian... hay que leer el libro para entenderlo, y yo sinceramente, lo recomiendo, porque su final me dejó helada. Cuando el Gobernador consigue reclutar nueva gente y armas, parte sin dudarlo al ataque de la prisión, y por fin, contemplamos la famosa escena y  nos dan el lujo de mostrarle al ataque, con su famosa frase de "matadlos a todos". Después del ataque, que acabará con la vida de Hershel exactamente de la misma manera en que murió Tyresse en los comics, todo el grupo huye y se separa. La segunda parte de la temporada tendrá al menos dos capítulos dedicados a cada subgrupo, y en principio, me dio otra cosa que esperaba: la ocasión de ver, al menos por un episodio, a Rick y Carl en plan padre e hijo, tal y como sucedió en los comics después de que el Gobernador les echara de la prisión. Glenn buscará, como no, a su amada Maggie, y su reunión será una de las cosas más esperadas de esta parte de la temporada. Y entre otras cosas interesantes, destaco dos. De un lado, me pareció excelente el capítulo de Daryl y Beth, en el que se les mostró más perdidos y vulnerables que nunca, y fue bonito ver la interesante relación que se está forjando entre los dos, nada romántico, o al menos, yo no veo eso, pero si una relación de protector y protegida, o de hermano mayor y hermana pequeña, muy del estilo de las de Lobezno y algunas de las jóvenes de X-Men como Kitty Pryde o Júbilo. Me gustó bastante, la verdad. Y de otro lado, la tragedia acontecida con las hermanas, en la que una de ellas (la mayor, Lizzie) enloquece y acaba matando a la otra reproduce lo acontecido en los comics con los pequeños gemelos, los hijos de Allen y Donna, que fueron temporalmente adoptados por Andrea y Dale. Uno de los niños perdió el juicio y mató a su hermanito, usando la misma frase que Lizzie al matar a su hermana "no he dañado su cerebro, volverá". Semejante acontecimiento obliga a Carol a tomar medidas drásticas, y mata a la chiquilla antes de que la cosa pueda ir a mayores, incapaz de ayudar de otra manera. Otra cosa a destacar es como aunque la serie transcurre por caminos paralelos, mantiene en cuanto a muertes, acontecimientos importantes y tramas una cronología similar a la de los comics. Esto nos lo demuestra la presencia de los personajes a los que, precisamente, les tocaba ya aparecer: Eugene, Abraham y Rosita, y su viaje a Whasington para, supuestamente, salvar al mundo de la infección zombie. Y muy bien caracterizados e interpretados los tres, debo decir. También tenemos una misteriosa comunidad de supervivientes, otra trama que debía ir apareciendo ya, aunque Terminus parece, como Woodbury, que oculta algún siniestro secreto. De momento, y dado el final sencillo y abierto que nos han brindado, deberemos esperar a la próxima temporada para ver exactamente de que se trata. Y como detalle, añadir que, a través de unos flashbacks bastante currados hemos podido conocer mejor a uno de los personajes más interesantes de la serie, Michonne, nuestra chica dura residente, que al igual que ya ha pasado con Daryl, tiene un lado mucho más humano dentro de lo que parece, e iba siendo hora de que lo mostrase.

Así que estamos ante una buena temporada, que creo que ha cerrado la trama del Gobernador (una de las más importantes, que marca un antes y un después en esta historia) por todo lo alto: enseñándonos más de este personaje, con el ataque en toda regla a la prisión y el "matadlos a todos", y la muerte final del Gobernador. Luego, separar a los personajes me ha producido sentimientos encontrados: de un lado, no ha sido mala idea para poder profundizar un poquito más en ciertas cosas, como en Michonne, o en algunas relaciones interesantes como la de Rick y Carl y la de Beth y Daryl, que han dado buenos momentos. Pero por otra parte, eso de mantener la reunión en espera (sobre todo la de Glenn y Maggie, la pareja por excelencia de esta serie) ha ralentizado también mucho la trama, y no es que hayamos visto mucha acción en la segunda mitad de la temporada, cosa que supone un problema para muchos espectadores, y que francamente, hace que a veces te aburras un pelín viendo la serie. The Walking Dead tiene que mejorar en ese aspecto, y saberse equilibrar con todo un poquito mejor. Un Apocalipsis zombie puede tener muchas cosas: acción, reflexión acerca del género humano, humor, romance... yo que sé, da para mucho, como casi todos los escenarios postapocalípticos. Aún con todos sus fallos, creo que esta sigue siendo una gran serie, y seguiré viéndola. Además, con la presencia de Eugene, Abraham y Rosita y el tema de las comunidades se abre la etapa actual de los cómics, una bastante interesante que ha ido un pelín lenta al principio pero que ha cogido fuerza hasta ser tan interesante o más que la de la prisión. Solo queda que nos confirmen una cosa: quien hará de Negan al frente de su cruel banda de moteros, que deberían aparecer en la próxima temporada. Por lo que se ve, y por suerte para los que nos gusta, tenemos The Walking Dead para rato.