Revista Cultura y Ocio

Tiempo... ⌛

Publicado el 04 mayo 2016 por Selene2
¿Qué es el tiempo? Me pregunto cada segundo del día. Pero, ¿qué es un segundo? ¿y un día? En realidad, si nos ponemos a hacer preguntas... ¿qué es la vida? Últimamente he estado pensando sobre todo un poco. Sobre nuestro concepto de las cosas. El porqué hay años que parecen vidas, y porqué hay vidas que parecen segundos. La razón por la cual atesoramos el tiempo como paño en oro, pero dejamos que los días transcurran sin siquiera notarlo. 
He estado pensando sobre la vida. Sobre el futuro. Sobre el pasado. He cerrado los ojos y he rememorado los años en los que el tiempo era largo e infinito. Cuando era niña, las horas transcurrían deliciosamente lentas y no hacía falta preocuparse por nada. Si se te acababa un día, aún tenías el siguiente, y si se te acababa ese, aún te quedaba por delante un mes. Esa infancia que, al vivirla, transcurrió lenta y suave, sin preocupaciones. Ahora que miro al pasado, y lo comparo con lo que está por venir, ya no tengo esa sensación de eternidad. Más bien se me ha pasado como un leve aleteo de una mariposa, o como el latido de un corazón. Y es que cada vez que mi cronómetro aumenta, parece que va más rápido. Siento que la vida se está acelerando, y no tengo ni los medios ni la fuerza para frenarla. 
Ahora necesito pararme durante un segundo. O unas horas. O unos años. Se me está escurriendo la vida entre los dedos, y lo único que siento es el latido de mi corazón. Cada vez más rápido. Parpadeo y de pronto he perdido cuatro años. Sí, cuatro años de mi vida han desaparecido. Cuatro intensos, brutales, bellos, terroríficos e increíbles años. Y es que en cada día de esos cuatro años he vivido una vida. Pero ahora que ya han pasado, siento que tan solo ha transcurrido un segundo. Me acuerdo de aquella niña insegura y temerosa, con orgullo y astucia. Esa niña que decidió que estos cuatro años iban a ser los mejores de su vida. Esa niña que, sin capacidad para comerse el mundo, tenía claro todo lo que quería ser, y hacer. Y ahora me miro a mi. Sigo siendo una niña por fuera, pero siento que mi mente se ha forjado en estos cuatro años. Ahora soy una mujer fuerte, con inseguridades pero confianza en mi misma. Ya no tengo claro que va a pasar en los próximos años, pero tengo la valentía que necesito para enfrentarlos. 
Antes pensaba que no era necesario marear mis pensamientos con tontas inseguridades que ya tendría tiempo para resolver. Ahora ya no tengo tiempo. La arena ya ha caído, y aún tengo una decisión que tomar. Se han pasado los segundos, las horas, los días, y los cuatro años. Ya no es momento para pensar. He cerrado los ojos, durante apenas un instante y mi vida entera ha transcurrido en ese momento. Todo lo que creía estable está cambiando. He abandonado la seguridad de mi capullo, y he abierto mis alas de mariposa ante al mundo. Me he arrojado a una tempestad, y voy a seguir el camino que los vientos del destino elijan.
Personas que llevaban conmigo toda mi vida, se enfrentan ahora a sus caminos; caminos diferentes a los míos. Ahora me toca caminar sola por el mundo. Ha llegado la hora de valerme por mí misma. Y es que se me ha acabado el tiempo. El tiempo de ser niña, de ser feliz en mi burbuja. De ser alguien pendiente de madurar. 
El tiempo me ha arrebatado latidos de mi corazón de los que no he sido consciente. Me ha separado de personas, de lugares y de situaciones.Pero solo el tiempo, caprichoso, podrá devolverme a mi lugar, al lugar al que pertenezco.El tiempo lo puede todo, es poderoso e invencible y no se puede controlar.Pero... ¿qué es el tiempo?
Tiempo... ⌛

Volver a la Portada de Logo Paperblog