Estamos terminando Enero, y se acaba la cuesta que tanto nos cuesta. Pero también se acaba el mes de proponerse hacer cosas. Por fin. Está mal hecho este sistema. Nos atiborran en Diciembre y luego en Enero hay que hacer propósitos. Nos manejan como quieren.
Se ve que tengo que tener una mentalidad escolar porque para mi el mes de los propósitos es Septiembre. Curso nuevo, vida nueva. Pero que a Octubre no llegan, vamos. El caso es proponerse. Lo que sea.
Pues no me voy a proponer nada más. Estoy harta. A mi la única proposición que me interesa es la de George Clooney a cenar. Lo demás al final acaba siendo un desastre (probablemente la cena lo fuera también porque a ver como iba a yo a comer nada con ese hombre delante y como me iba a apañar a hablar inglés con los nervios que iba a tener).
Y es que cuando te propones algo parece que lo estás llevando al fracaso directamente. Te apuntas a gimnasios, cursos, cosas en general que sabes perfectamente que no vas a hacer, ni a terminar, ni a nada. Sabes perfectamente que la dieta te dura lo que dura un caramelo (mmmm) a la puerta de un colegio. Sabes que vas a volver a fumar , o al vicio que quieras dejar. Pues si ya lo sabemos… para que nos proponemos nada.
Yo me he propuesto cambiar un poco la estructura del blog. Tengo que decir que desde que empecé en Septiembre me ha dado muchas satisfacciones y quiero que siga dándomelas, ha sido una de los propósitos de comienzo de curso y lo estoy cumpliendo a rajatabla. Pero con la experiencia voy viendo cosas que quiero cambiar: publicar sólo dos post a la semana (a la gente no le da tiempo a leerlo todo), escribir sobre temas más concretos dirigidos a las It Woman de más de cuarenta, cambiar los nombres de las categorías, hacer algo con el diseño, en fin… que poco a poco iréis notando algunos cambios (o igual no los notáis que tampoco son para tanto).
El caso es que mi propósito para este año es seguir escribiendo, espero que os guste todo. Y muchas gracias por leerme. Gracias.
Archivado en: Cosas de la vida