No nos engañemos, hay muchas cosas que decir acerca de la época en que vivimos.
Creo que más de una vez me he ido a la cama pensando de qué manera podrían arreglarse algunas cosas, pero las soluciones a problemas importantes no suelen llegar a mentes preocupadas, de hecho, me parece que llegan a la cabeza de aquellos que no han estado pensando en nada, porque si no, las soluciones se encontrarían antes ¿o no?
Es que hay
mucho viento por estos días, tal vez es eso lo que nos hace tambalear, el asunto es que este viento se hace cada vez más fuerte y termina también haciéndonos tambalear la fe, el respeto y a veces incluso nuestra integridad total.Tal vez sea por eso que hoy he visto en las noticias que han asesinado a una mujer, veinticinco puñaladas le dieron a causa del viento. Tal vez sea por eso que las autoridades están siendo investigadas, a causa del viento que les nubló la vista y los hizo actuar mal. Tal vez por eso en lo que va del año he escuchado de más violaciones de las que había escuchado en mi vida, a niños y bebés incluso, que fueron víctimas del viento.
Pero y este viento ¿de dónde viene?
Porque si tal vez conociéramos su origen podríamos erradicarlo, el problema es que está en cada rincón del mundo, escondido, agazapado,
esperando para salir y hacerse sentir más fuerte cada vez.
Sí, quiero pensar que es culpa del viento que están pasando tantas cosas, quiero pensar que no es culpa nuestra, que no somos nosotros, que actuamos tan horriblemente mal a causa de un factor externo.
Pero no, ¿para qué engañarse?, no es malo un poco de viento cuando nos hace girar en la dirección correcta, el problema nace cuando lo convertimos en huracán, en tormenta, en tornado, en destrucción y arrasamos con todo a nuestro paso.
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