Revista Cine

Tiempos para la sinceridad

Publicado el 15 diciembre 2016 por Maresssss @cineyear

Cuántas veces hemos oído (o dicho) que la verdad duele... No es sólo que duela, es que muchas veces parece que preferimos vivir en la ignorancia a la sinceridad, con tal de no asumir la realidad. Precisamente entramos en fechas en las que el engaño, la falsedad y la ocultación de la verdad tienen un gran protagonismo. El cine está plagado de escenas que reflejan momentos en los que la sinceridad incomoda a quien la recibe, aquí sólo voy a hacer referencia a algunos de esos momentos.

En la película Synecdoque, New York hay una escena en la que una pareja acude a su psicóloga. Adele le cuenta a la psicóloga (estando Caden, su marido, delante) que ha fantaseado con la muerte de él. En este momento, todo cambia para Caden. Probablemente por la incapacidad de asumir una verdad tan terrorífica: ella, en su interior, no quiere seguir viviendo con él.

Tiempos para sinceridad
Tiempos para la sinceridad

Si nos asomamos por un momento a La gran belleza, el protagonista pone en su sitio a una persona que no para de criticar sin mirarse a ella mismo previamente en un espejo. Ésta, aunque pensemos que es una condición muy española, vemos que en Italia también se entiende perfectamente.

No podía faltar la película más difundida que trata este tema (además, de manera central), Mentiroso compulsivo. También en tono de humor se ha reflejado este aspecto en la historia del cine. Dejo sólo un fragmento, pero especialmente en este filme hay muchas escenas en las que se reflejan las diferentes reacciones de las personas cuando oyen la verdad:

Yendo a una película más actual y que personalmente me ha encantado, en Captain fantastic el padre utiliza la verdad a la hora de criar a sus seis hijos. Hay una escena en la que los niños y el padre cenan con otros familiares y queda de relieve la diferencia entre el tipo de educación de una familia "ordinaria" y el de la suya, y básicamente es que a los hijos se les suele ocultar una importante parte de la verdad. En esta escena que dejo a continuación, probablemente veamos un poco extraña la manera en la que el padre explica qué es una violación. A lo mejor tratar ciertos temas con naturalidad y sinceridad hace que los hijos crezcan con menos prejuicios y con mayor capacidad de reflexionar por sí mismos:

En el cine español encontramos un buen ejemplo en la película Caníbal. El protagonista (atención spoiler), asesino que se come a sus víctimas, confiesa a la mujer a la que ama que había matado a su hermana y que también se la había comido después. Ella no sabe por qué se lo está diciendo ni cómo reaccionar. Lógicamente, hay un giro en la relación entre ambos a partir de ese momento. La verdad es a veces complicada, y si eres un psicópata, más.

Tiempos para sinceridad
Tiempos para la sinceridad

Para terminar, este magnífico corto de Alberto González con poquísimos recursos y toda la grandeza puesta en el texto, que trata, como no, del tema de este artículo, la sinceridad:

Leer más en: Desvarios cinéfilos


Volver a la Portada de Logo Paperblog

Revistas