Mi puntuación: 4/10
Revista Cine
Tercera colaboración de Matt Damon como actor y guionista con el realizador Gus Van Sant cuyo resultado es una película bien dirigida, con interpretaciones correctas, un argumento sin demasiados sobresaltos y que no destaca en nada, para bien o para mal. La compra de unas tierras a unos pueblerinos por parte de una gran empresa es el detonante de una trama que intenta transmitirnos un mensaje que apenas arriesga, dejando margen al espectador para que elija bando y tome su propia decisión ante lo que le están mostrando. Un producto trivial tan fácil de digerir como de olvidar una vez visto.