Tifanny Pontes Dover fue una enfermera, conocida por ser la primera víctima de empozoñamiento por vacuna del covid en 2020.
Era la jefa de enfermería del CHI Memorial Hospital de Chattanooga, en Tennessee (EE UU).
Para promocionar las vacunas (seguramente que a comisión), decidió ponérsela ella misma. Pero algo salió mal. En vez la de mentira de placebo, se emponzoñó con la de Pfizer y se grafenó cosa linda.
Poco después y mientras daba una entrevista a la prensa hablando de las bondades de la vacuna, empezó a sentirse mareada y se desmayó.
En un principio se justificaba ese desmayo diciendo que era algo que le pasaba con cierta frecuencia. Cómo padeciendo algo así le pudieron poner una vacuna, un misterio.
Poco después desapareció. De ser mediática pasó a no dar señales de vida en las redes sociales. Su cuenta fue colapsada con mensajes preguntándole que como estaba o si seguía viva.
Ni de ella, ni de amigos ni de familiares respondieron. Mil comentarios dando las condolencias a la familia, y nadie desmintió su muerte.
Era evidente que había muerto por la vacuna (derrepentismo). Las Farmacéuticas, la OMS y los gobiernos de medio Planeta, no quería que se supiera la verdad. Eso haría que la gente despertara y se opusiera a la vacuna, con lo que perderían miles de millones.
Al principio quisieron hacer un "Esta muerta está muy viva" con deepfakes, pero no debía haber presupuesto para eso y pusieron a una parecida en un vídeo con mascarilla diciendo que era ella.
Newtrola y Maldita.es y toda la maquinaria del ministerio de la verdad española, se apresuraron a desmentir su muerte y que solo había dejado de estar viva por vacunación.
En el registro civil sale una persona con su mismo nombre, su misma edad, en su mismo condado, casada con el mismo hombre, como fallecida. Cierto es que en su pueblo natal de 1400 habitantes murió una Tiffany Pontes Dover el mismo día, pero no se puede estar al 100% seguro de que estuviera muerta. Decir eso es de negacionista.
La familia amenazada (o sobornada) no hacen comentario alguno sobre el asunto. Pero todo esto sería mucho más fácil y se evitarían especulaciones si alguien saliera a contar lo que está pasando, preferiblemente la propia protagonista si todo esto fuera falso.
Se publicaron fotos y un video en su cuenta de Instagram que podría haber sido cualquiera.
Todo menos ella saliendo en un video diciendo que estaba bien.
Pero tú tranquilo, ponte la mascarilla apretada hasta ponerte azul, vacúnate y Tatúate el código qr de tu puto Certificado covid en el culo.