- Tío, ya lo he conseguido -le dice a su compañero-, ¡ya estoy fuera!
Molesta, grita por el pasillo, intenta entablar conversación con el otro, que se quedó dentro -pobrecillo- con el cristal de la ventana de por medio. Golpea los azulejos de la pared, se sienta y se levanta varias veces, supongo que para desentumecer los músculos, encerrados en vaqueros azules que no puede lucir. El borde gris de unos calzoncillos asoman por el borde del pantalón: la última moda, al estilo del tonto del pueblo de toda-la-vida...- Tío, tío -llama-, ¡vamos!, ¡que te echen de una vez!¿No podría plantearse alguna sesuda señoría de que, tal vez -sólo tal vez-, determinadas personas no pueden -no, no, que no pueden- estar en un centro educativo?Revista Diario
El alumno del lateral izquierdo, casi al fondo, lo ha conseguido: ha sacado de sus casillas a la profesora, es un machote, un fenómeno social, lo ha logrado, ha alcanzado su objetivo vital de hoy. En este día, Inspección mediante, ha obtenido su mejor calificación: