Los frenos son una parte esencial de una bicicleta de montaña. Con estas bicicletas se suelen bajar por pendientes bastante pronunciadas, por lo que una buena frenada es fundamental para afrontarlas con seguridad.
Vamos a ver los diferentes tipos que nos podemos encontrar en una bicicleta de montaña. Básicamente son tres, los V-Brake, los de disco mecánicos y los de disco hidráulicos.
Frenos V-Brake
Estos son los que llevaban todas las bicicletas de montaña hasta la aparición de los de disco. Con la llegada de estos últimos, este tipo de frenos se han quedado relegados a las bicicletas de gamas más bajas.

Es en estas condiciones donde los frenos de disco ganan por goleada a los V-brake.
Frenos de disco mecánicos
Digamos que los de disco mecánicos son la evolución de los V-Brake. También se accionan mediante un cable de acero, al igual que los V-Brake. Van a tener unas prestaciones notablemente superiores al de los anteriores, pero aun así están bastante por debajo en prestaciones respecto a los hidraúlicos.

Frenos de disco hidráulicos
Sin duda son los más eficaces y los que más prestaciones ofrecen. En cuanto a prestaciones nos referimos sobre todo a potencia de frenada. Van a tener mucha más potencia de frenada que los mecánicos y los V-brake.
Funcionan exactamente igual que los frenos hidraúlicos de una motocicleta, pero son de menor tamaño. En este tipo de frenos hay que tener muy en cuenta el tamaño de los discos que se utilicen.

Las bicicletas de rally y de cross country suelen llevar discos de 180 mm en la rueda delantera y de 160 mm en la rueda trasera.
