Tipos de tarjeta de crédito: ¿cómo elegir la que me conviene?

En el mercado hay diferentes tipos de tarjetas de crédito. Las hay, literalmente, de todos colores, olores y sabores; para prácticamente todas las personas. Sin embargo, ante esta abrumadora cantidad de opciones te preguntas ¿Cuál te conviene? Es por esto que en Finanzas & Proyectos abro este tema para que sepas escoger aquella que se ajusta a tu realidad financiera.

Tipos de tarjetas de crédito y sus características

No son pocas las llamadas que posiblemente recibes ofertándote productos financieros. De hecho, tan pronto te haces "visible" en los burós de crédito; el departamento de mercadeo inicia un contacto con esa base de clientes para ofrecerte los tipos de tarjetas de crédito que existen en su portafolio de productos.

Sin embargo, ante la cantidad de llamadas que puedes recibir, y las diferentes ofertas y condiciones que van de la mano de cada tarjeta que te ofrecen. Es probable que pasen dos cosas:

Que elijas una o varias
Que no elijas ninguna

Esto a razón de que, en el caso de la primera opción, realmente quieras tener una tarjeta y asumas que es un "regalo" por tu desempeño financiero o que, en el caso la segunda opción no te interese, por distintas razones, tener este tipo de producto financiero.

Por una u otra razón, lo que sí es seguro es que tienes que tomar una decisión; y ya sea para rechazarla o aceptarla, debes tener algún tipo de marco de referencia o sustentación para hacerlo.

De manera general existen cuatro tipos de tarjetas en el mercado:

Esta clasificación responde a dos variables básicas:

Beneficios marginales
Montos de dinero aprobados

En otras palabras, partiendo de qué tanto pueda dar una tarjeta en términos de beneficios y el límite de crédito que haya sido aprobado, se pueden tener desde las sencillas o básicas (regulares) hasta las más complejas o extravagantes (Platinum y Black)

Y, aunque esta clasificación puede variar de una entidad a otra, por lo general casi todas las instituciones financieras se manejan con esta clasificación.

A todo esto, dentro de esa clasificación existe otro nivel que las sub-clasifica partiendo del nivel de especialización que tenga la tarjeta, a razón de estar afiliada a algún tipo de establecimiento determinado.

Esto quiere decir, que dicha diferenciación se puede ver, por ejemplo, en los tipos de tarjetas de crédito emitidas por entidades comerciales como estaciones de gasolina, tiendas por departamentos, etc. que, aunque tengan esa sectorización, de igual manera se encuentran en una de los cuatro tipos que describí más arriba, porque ellas mismas son etiquetadas como regular, gold, etc.

¿Qué marca y tipos de tarjetas de crédito existen?

Independientemente de los diferentes tipos de tarjetas de crédito que existen en el mercado, la manera en que están segmentadas y la subclasificación por especialización dentro del contexto del comercio. En esencia, las tarjetas son emitidas por los bancos o instituciones financieras.

Porque requieren de un respaldo de ese crédito que están facilitando al consumidor. Ya que, al final del día, este tipo de instrumentos se supedita a una deuda. No es un regalo, ni un premio. De hecho, hay expertos que sugieren que se le cambie el nombre a tarjeta de deuda, porque realmente lo que se tiene es un plástico con una deuda de consumo que espera ser usada.

Sin embargo, como ya probablemente sabes, en el mercado hay 4 grandes marcas que son las que dominan el mercado:

Evidentemente, no todas tienen la misma participación dentro del pastel de consumidores, porque estas responden a la estrategia de mercadeo y publicidad que se tenga. Sin embargo, quien lidera es Visa. Siendo la más popular en 123 países. Es seguida por American Express en 23 países y MasterCard en 22.

Y esa primacía se refleja no solo en su presencia en tantos países, sino también en la cantidad de tarjetas circulando (304 millones en Estados Unidos y 545 millones fuera) con un volumen de transacciones de USD 1.2 Trillones en el 2014[1]

¿Cómo elegir el tipo de tarjeta de crédito que me conviene?

Tomando en consideración la oferta que hay en el mercado, una pregunta común que me formulan los clientes que visitan mi consulta financiera es ¿Qué tipo de tarjeta de crédito elegir? ¿Cuáles parámetros debo tomar en cuenta a la hora de escoger el crédito plástico?

Y lo primero que quiero enfocar en ese sentido es que, la tarjeta de crédito es una responsabilidad, porque es una deuda. Por lo tanto, no tienes que tener una en tu cartera.

En otras palabras, perfectamente te puedes manejar sin ellas. No es una obligación. Te digo esto porque existen mitos de tarjeta de crédito que circulan desde hace un tiempo, en donde, básicamente, sino tienes una es casi lo mismo que ser un apátrida. Cosa que no es cierta.

Te reitero, no tienes que tener una tarjeta de crédito; y puedes vivir bien y tranquilo sin ella. No se te van a cerrar puertas, ni tendrás una letra escarlata en el pecho. Por lo tanto, tranquilo(a) si decides no tenerla.

Ahora, si entiendes que la puedes tener, y que esto no afectará tu manejo del dinero, quiero ofrecerte algunas pautas para determinar el tipo de tarjeta de crédito que te conviene:

Pauta No. 1: Define el tipo de beneficios que quieres

En esencia las tarjetas de crédito son iguales en su funcionamiento, metodología y formas de pago. No hay mucha diferencia entre una y otra, sin embargo, en donde sí hay muchas diferencias es el tipo de beneficios que ofrece.

Estos van desde las que se enfocan en viajes hasta las que buscan recuperar el crédito de una persona que se ha manejado mal con ellas. En otras palabras, puedes ver toda una gama de opciones que incluyen descuentos, recompensas o puntos por uso, bajo costo financiero, etc.

Por lo tanto, tienes que identificar qué es lo que estás buscando con ella. Y sobre esa base, elegir la que se ajusta a aquello que buscas. Por ejemplo, a mí me gusta mucho viajar, por lo que mi tarjeta se enfoca en la acumulación de millas para ganar tickets aéreos.

Pauta No. 2: Ten bien claro el límite de crédito que puedes manejar

Luego de definir los beneficios, tienes que tener bien claro el límite de crédito que puedes manejar. Recuerda que dentro de la clasificación de los tipos de tarjetas de crédito existentes, puedes encontrar desde regulares hasta black, y estas se diferencia tanto en los beneficios como en los montos aprobados para el consumo.

En ese tenor, lo recomendable es que no excedas el 30% de tus ingresos. Esto como una medida de prevención porque este instrumento de deuda es el más costoso del mercado y cuando excedes esas capacidades se torna inmanejable. Por lo que toma en cuenta esta recomendación.

Pauta No. 3: Coordina los días de corte y pago de tarjeta en función de fechas que te favorezcan

Esta pauta es clave, porque los días de corte y pago definen el manejo prudencial de tu tarjeta de crédito. Debes conocerlos y coordinarlos en base a tus intereses.

Usualmente los bancos tienen entre 3 y 4 fechas predeterminadas para esto. Por lo que, procura que dichas fechas se ajusten a tu quincena de mayor ingresos o más flexible en compromisos financieros, para que puedas saldar a tiempo el monto adeudado sin mayores preocupaciones.

Pauta No. 4: Elige una tarjeta vinculada a tu institución financiera principal

Por último, si te decides a elegir una tarjeta, y ya has ponderado las variables de los beneficios, el límite de crédito y los días de corte y pago; trata, dentro del marco de la posibilidad elije aquella que esté vinculada a tu institución financiera personal.

Por dos razones básicas:

En la primera razón, aunque el internet banking plantea una interconexión entre instituciones financieras, sin duda alguna, es mejor hacer transacciones entre cuentas o productos de una misma institución a razón de los costos en que se incurren.

Mientras que por el lado del historial, cuando forjas una relación de éxito con tu entidad financiera eso te abre puertas dentro del mismo contexto de ese banco. Es decir, no es lo mismo una persona que adquiera un préstamo, por ejemplo, que no tenga vínculos comerciales a una que sí los tenga.

Pero esto no solo en términos de préstamos personales o de otro tipo, también en asuntos relacionados a las inversiones, cuentas de ahorro, etc. Centrar tus productos en una sola institución te aventaja el conocimiento mutuo, tú como consumido(a) y ellos como institución financiera.

Conclusión

Ante la abrumadora cantidad de opciones de tarjetas que hay en el mercado, elegir la adecuada para ti no es una labor sencilla. Sin embargo es algo que puede llevar a cabo sin mayores complicaciones.

En ese sentido, existen diferentes tipos de tarjetas de crédito, que buscan satisfacer tus necesidades como cliente, estas van desde las regulares hasta las platinum y blacks, las cuales se diferencia en los beneficios y límites de crédito.

Es por esta razón que debes tomar en cuenta estas 4 pautas básicas para hacer una elección que le añada valor a tu gestión financiera personal:

Define el tipo de beneficio
Ten claro el límite de crédito apropiado y ajustado a tu realidad financiera
Coordina las fechas importantes
Elige una tarjeta vinculada a tu institución financiera principal.

Con estas pautas tendrás los elementos de juicio necesarios para hacer una elección que le aporte valor al manejo del dinero que tienes y que te permitirá tener un mejor desempeño financiero.

Por lo que si esta entrada sobre los tipos de tarjetas de crédito te fue de utilidad, te invito a que me des tu opinión y comportas el contendido. Puedes hacerlo en el formulario de respuesta y vía tu correo electrónico o bien a través de tus redes sociales.

Y si te interesa ir un poco más profundo en el tema de los tipos de tarjeta de crédito, adquiere el libro Guía para hacerse rico sin cancelar sus tarjetas de crédito escrito por Robert Kiyosaki siguiendo el enlace en la imagen más abajo.