![TIPS PARA EVITAR EL MALESTAR GASTROINTESTINAL DURANTE LA CARRERA TIPS PARA EVITAR EL MALESTAR GASTROINTESTINAL DURANTE LA CARRERA](http://m1.paperblog.com/i/240/2409346/tips-evitar-el-malestar-gastrointestinal-carr-L-oi2Gx_.jpeg)
¿Por qué se producen?
Las razones de la sintomatología no están del todo claras. Pueden influir: el menor riego de sangre al sistema gastrointestinal, los cambios hormonales (se generan hormonas de estrés y corticoides), los efectos en la motilidad gastrointestinal o incluso factores mecánicos (el tipo de movimiento del cuerpo durante el ejercicio)
Cuando estamos realizando una actividad física el organismo tiende a redistribuir el flujo sanguíneo para mantener bien oxigenados nuestros órganos vitales y que llegue suficiente oxígeno a nuestros músculos. Para poder realizarlo "descuida" el sistema digestivo, disminuye su riego sanguíneo (vasoconstricción) provocando lo que técnicamente se conoce como "isquemia intestinal transitoria"
Dicho de otra manera: para repartir más oxígeno a nuestros músculos, disminuye la cantidad de oxígeno que llega al sistema gastrointestinal.
El grado de isquemia dependerá fundamentalmente de la intensidad y duración del ejercicio. Cuando el ejercicio es extenuante se ha observado una disminución del riego de hasta un 80%
¿Quiénes son más susceptibles a padecerlos?
Se ha encontrado mayor riesgo en (Burke: pág 27):
- Mujeres
-Deportes de resistencia y específicamente corredores ya que, a diferencia de los nadadores o los ciclistas, el movimiento durante la carrera produce "sacudidas" arriba y abajo que pueden favorecer que aparezcan.
-Ejercicios de alta intensidad (suelen ser más frecuentes durante las competiciones, puesto que se eleva la intensidad de ejercicio o sobre entrenamientos a ritmo de competición)
-Falta de entrenamiento. En las personas que siguen un entrenamiento de contínuo la disminución del flujo al sistema Gastrointestinal es menos severa y por tanto los síntomas aparecen en menor medida
-Deshidratación. Cuando estamos deshidratados nuestra sangre está menos fluída, tarda más en circular y si a eso le unimos que llega menos sangre a nuestro sistema Gastrointestinal se favorecerá que aparezcan los síntomas.
-Consumo de alimentos ricos en fibra, lactosa y grasas; producen más enlentecimiento del vaciado gástrico.
-Deportistas con problemas gastrointestinales preexistentes (ejemplo enfermedad de Crohn o colon irritable)
¿Cómo podemos evitarlos?
1. Observa y experimenta. Cada persona es un mundo y no todos respondemos de la misma manera según qué alimentos por ello es importante observar qué hemos comido antes y qué respuesta hemos obtenido durante el entrenamiento. En este caso llevar un diario dietético podría ayudarte a identificar el alimento en cuestión que te condiciona para dejar de consumirlo antes de los entrenamientos o competiciones. Los alimentos con mayor riesgo de provocar esta sintomatología son:
-Cafeína. Ojo con algunas bebidas energizantes
-Alimentos con alto contenido en fibra (cereales integrales, fruta, verdura, legumbres...)
-Alimentos con alto contenido en lactosa (leche, helados cremosos, batidos...)
-Alimentos con alto contenido en fructosa (frutas y zumos)
-Consumo de alimentos ricos en proteínas y grasas ( frituras, rebozados, batidos proteicos...)
2. Ingiere la comida sólida al menos 3 horas antes del ejercicio. En el caso de que se trate de un entrenamiento o competición a primera hora de la mañana puedes recurrir a comidas líquidas (los desayunos a base de licuados suelen ser mejor digeridos y de manera mucho más rápida que los sólidos)
3. Procura que la comida de la tarde de antes o la mañana de antes de la competición sean más pobres en fibra. Recurre, por ejemplo, a evitar las verduras la tarde de antes y a sustituir la pasta integral por la refinada y los postres de frutas por zumos o yogures.
4. No experimentes el día del evento. No pruebes la barrita o el gel que utiliza tu compañero o que se reparte en la competición. No es momento de arriesgar a ver cómo te sienta.
5. Si tienes tendencia a sufrir esta sintomatología, diluye la bebida isotónica (empieza por una concentración de un 2-4%) y ves aumentando su concentración a medida que vas observando su tolerancia
6. Evalúa tu dieta. Un alto consumo de proteínas y grasas puede fomentar la aparición de molestias digestivas. Acudir a un dietista-nutricionista que evalúe tu dieta y elabore una pauta personalizada a tu caso te puede ayudar a solventar el problema. En el caso de que los síntomas sean recurrentes también es recomendable pedir asesoramiento médico; el médico deportivo puede evaluar tu historia clínica-deportiva y en consenso con el digestólogo considerará la opción o no de realizar las pruebas médicas que consideren más pertinentes.