[Tócala otra vez, Sam] Amor a quemarropa: You’re so cool
Javier M. Banda 19 noviembre, 2013 0
Que, muy a mi pesar, por más que lo he intentado evitar no me he podido resistir (y me siento culpable por ello), hoy reanudamos esta sección con otra pieza del archiconocido compositor alemán Hans Zimmer. Prometo cambiar en mi próximo reportaje, pero el azar quiso que la viera hace tan solo unos días y recordara ese inconfundible tema principal que seguro todos conocéis, ¿me equivoco?
Amor a quemarropa (1993) está dirigida por el malogrado Tony Scott. Sin embargo, sin querer restar un ápice a su labor (no en vano, para muchos está considerada como su mejor película) el verdadero mérito de la misma es el magistral guión de Tarantino. Un guión que tiene mucho de autobiográfico y que proviene de un mediometraje de 1987 de 69 minutos de duración que acabó quedando en 35 minutos por culpa de un incendio. Tarantino acabó puliéndolo y vendió los derechos para poder financiarse la que a la postre sería su Opera Prima: Reservoir Dogs.
Sinopsis: Clarence (Christian Slater) conoce de manera inesperada en un cine a Alabama (Patricia Arquette); pronto se enamoran y deciden contraer matrimonio. Lo bueno viene cuando ella le revela que es prostituta y a Clarence no se le ocurre otra cosa que intentar sacarla de ese sórdido mundo intentando ajustar cuentas con su “chulo”, al que da vida un enorme, como siempre, Gary Oldman. Por error, Clarence acaba con un maletín lleno de coca hasta las cejas, lo que desembocará en un sinfín de frenéticos acontecimientos que les cambiará la vida… A lo largo del metraje desfilan un buen número de secundarios de lujo como Dennis Hopper, Christopher Walken, James Gandolfini, Brad Pitt y Val Kilmer. Atentos a una escena en la que comparten plano Dennis Hopper y Christopher Walken, que no diré más…
Como si de una película escrita y dirigida por Quentin Tarantino se tratase, salvo algunas piezas instrumentales del compositor germano (me estoy refiriendo a Hans Zimmer), está compuesta por canciones; en este caso, al más puro estilo rockabilly. De hecho, tiene cierto protagonismo en la historia un tal Elvis Presley, ¿os suena de algo?
En lo que respecta a la parte instrumental, la más conocida es, sin duda alguna, el tema You’re so cool. Esta pequeña pieza, que de manera recurrente la hemos podido escuchar en espacios publicitarios, en cuñas de radio, etc, algunos la ven como un “homenaje” a la música de Badlands, de Terrence Malick, compuesta por George Tipton y con apuntes de piezas clásicas del compositor Carl Orff, entre otros, mientras que hay quienes la conciben directamente como un plagio en toda regla. Juzgad vosotros mismos…
Ahora, como no puede ser de otra forma, vamos con esas excentricidades que uno puede encontrar en la red; con esas otras versiones de gente anónima que no hay que desmerecer en absoluto. Primero, la que parece que es la de un grupo alemán que se hacen llamar m&m drops, que son conocidos por emplear sonidos de percusión y que cuentan con su propio canal en Youtube. Interpretan la pieza en el interior de una iglesia y es una auténtica gozada para los sentidos…
También ha llamado mi atención esta otra versión de Cirian Byrne, un irlandés que parece ser muy conocido en su país pero que a mí no me sonaba de nada hasta ahora. Por lo que he podido ver, tiene tanto temas propios como versiones. Aquí realiza una magistral interpretación del You’re so cool a guitarra durante la que parece es la celebración de una boda en una playa de Dublín.
Por último, la que hizo el conocido músico gallego Carlos Nuñez en Cinema do mar (2007).
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