«Todo lo peor…, !con el mejor Gellida!»
Reseña escrita por Maudy Ventosa.
“Todo lo peor es lo mejor cuando a uno deja de importarle
de qué lado está…”
Inteligente e impecable nuestro protagonista preferido, el ruso con la “cara en obras”, experto psicólogo criminalista y agente de la KGB, destinado en Berlín, Viktor Lavrov. Me descubro ante el colega y siento no haber estudiado en su misma universidad. Hasta hubiera hecho pellas con el…
Asusta ver el listado de personajes principales que nos propone el autor antes de comenzar la historia, pero ya estábamos curados de espanto con Todo lo mejor. Porque además no se llaman Pérez o García, sino Allendorf, Sutcliffe, Zorbinian o Repplinger… !como para perderte!
Gellida te atrapa desde la primera línea y te condena a no poder dejar de leer. Se supera aunque parezca imposible y crea adicción. Y cada vez mata mejor, no solo con la pistola, sino también con instrumentos de tortura terroríficos que la historia debe enterrar y borrar de la memoria porque son de una crueldad extrema. Como casi siempre, la realidad supera la ficción…
La novela transcurre en el Berlín de la RDA, al final de la Guerra Fría, en el que conviven agentes, agentes dobles, espías, policías, ministros, conserjes, profesores, médicos, psicólogos, asesinos mesiánicos, heterosexuales, homosexuales, relojeros… y víctimas. Y casi todos mienten. Son miembros de la Kriminalpolizei; de la Stasi; de la HVA; de la KGB en la RDA; de la KGB en Berlín; de la CIA; del Mossad… Trama de espías donde nadie se fía de nadie, porque incluso te ordenan a quién debes amar… o ¿eso surge después de manera inevitable? Trabajo excelente del autor para conjugar esta complicada trama repleta de personajes –algunos reales- que juegan al despiste y en varios equipos a la vez. No importa la verdad siempre y cuando haya alguien a quien le carguen el muerto. A nivel público, hay que guardar las apariencias. Siempre. No existe la homosexualidad en la RDA a pesar de que proliferan los clubs nocturnos y son lugares de cita para gays venidos, incluso, del otro lado del muro… Y entonces comienzan a aparecer cadáveres brutalmente asesinados, de homosexuales. La mayoría llevaba una doble vida, la pública impecable y exitosa, como la del miembro del Departamento Central para Comunicaciones Seguras y Protección Personal de la Stasi, Johannes Allendorf, integro y leal a los ideales sobre los que se ha cimentado nuestra patria; felizmente casado; la vida oculta, llena de dolor y soledad. Trama policial y espionajes. Excelente mezcla solo al alcance de verdaderos maestros. Como Gellida.
Será el brillante psicólogo criminalista, experto en asesinatos diferentes, quien se encargue de investigar este asesinato junto al arrogante inspector de la Unidad Especial de Investigación Criminal de la Stasi, Florian Klein, que juega con una baraja muy grande… Los demás muertos no importan, son pobres homosexuales. Pero está su amigo Otto Bauer, desaparecido y en horas muy bajas, y se convierte también en una víctima potencial. Provoca ternura el profundo dolor que arrastra y la necesidad de protegerlo que emana de su hermanastra Birgit. Personajes también de Todo lo mejor que nos satisface volver a encontrar. Entre tanto malnacido, ellos son buenos y auténticos.
Y Erika Eisemberg, la mujer a la que Viktor ama profundamente y añora durante las semanas que se ausenta para realizar un curso en Moscú. ¿Sería capaz de matarla si se lo ordenaran?, ¿Podría mirarla a los ojos mientras dispara? Es muy dura la vida de los espías…El corazón no juega en estos casos…
Las escenas que transcurren fuera de Berlín se producen en el Presidio de Alta Seguridad de Parkhurst, Inglaterra –Reino Unido-. Viktor acude como eminencia en el estudio del comportamiento criminal para entrevistarse con uno de los mayores asesinos en serie de mujeres –casi todas prostitutas- de la época, Peter Sutcliffe. Tiene que determinar si es un maldito asesino o un perturbado mental. Fina ironía y brillantes diálogos.
Finaliza esta bilogía berlinesa a lo grande. El autor hace gala de su fino sentido del humor, de una perfecta ambientación, unas magistrales descripciones de los personajes –sobre todo de los asesinos-, y de una prosa maravillosa e inteligente.
Incondicional desde siempre y para siempre. Esperando ansiosa el siguiente…
PERSONAJES:
- Viktor Lavrov, Armando, es un excelente psicólogo criminalista nacido en Rusia. Como agente del KGB está destinado en Berlín. Irónico y brillante.
- Erika Eisemberg es miembro de la Sección de Espionaje, Soporte y Actuación se la Stasi. Se crió en el seno de una familia acomodada, y fue durante su paso por la universidad cuando se dejó llevar por la corriente antiimperialista… Atractiva, inteligente y seductora.
- Otto Bauer es inspector de la Kriminalpolizei. Ha perdido la movilidad del brazo izquierdo y no logra salir del agujero profundo en el que se encuentra.
- Birgit Bauer es sargento de la Kriminalpolizei. Se ha separado recientemente y cuida de sus hijos. Siempre preocupada y pendiente de su hermanastro Otto. Generosa y buena. Cercana.
- Jonas Kemke se crio cerca del rio Elba. Su padre era muy religioso y de el recibió mucha disciplina y un legado de convicciones castrenses del que no supo ni quiso escapar…
- Asa fue un rey de Judá, descendiente de David y Salomón que dedicó su vida a perseguir y castigar la homosexualidad…
- Peter Sutcliffe es un asesino en serie, “El destripador de Yorkshire”. Está recluido en el Presidio de Alta seguridad de Parkhurst. En espera de que determinen su futuro en un hospital psiquiátrico o en una cárcel.
- Johannes Allendorf pertenece a la Stasi, pero lleva una doble vida. Casado con Rebeca…
- Tobias Kaufman es judio y un buen relojero de Dresde.
- Heinrich es flaco y homosexual. Y el gran amor de Otto.
Y muchos más de nombres indescifrables que tendrá que descubrir…
SINOPSIS:
Varios cadáveres de homosexuales aparecen brutalmente asesinados en el Berlín Este de finales de la Guerra Fría. Las autoridades no le prestan la atención que merece hasta que un alto cargo de la Stasi que maneja información muy sensible para el Estado aparece muerto en las mismas circunstancias.
Por su experiencia en el comportamiento de la mente criminal, encargan la investigación a Viktor Lavrov, que, junto al inspector apartado de la Kriminalpolizei, Otto Bauer, buscará la manera de sumergirse en un mundo prohibido tras los pasos de un despiadado asesino mesiánico.
César Pérez Gellida regresa para descolocarnos con un trepidante thriller negro magistralmente ambientado en una época no tan lejana pero sí muy distante en el ámbito de los derechos y las libertades. Otra nueva joya del que es para muchos el mejor escritor patrio de novela negra.
«Había invertido algo menos de media hora en conseguir que se le llenaran de sangre los cuerpos cavernosos y ocho segundos en dejarlo inconsciente. Antes, eso sí, se había asegurado de salir por separado de aquel antro y de que nadie se cruzara con él entrando en su portal, lo cual, en los tiempos que corrían en la República Democrática Alemana -donde expresar con libertad la condición sexual de cada uno seguía siendo una quimera para los colectivos de gais y lesbianas-, más que una actitud comprensible era un comportamiento recomendable. Una vez dentro, habían ido directos al grano sin pasar por los incómodos y repugnantes preliminares, circunstancia que le agradecía de veras, aunque, a la vista de los hechos que acontecieron inmediatamente después, no podría decirse que lo hubiera tenido en consideración. Repitiendo la fórmula de las ocasiones precedentes, había tomado la iniciativa de manera inesperada, colocándose a su espalda con la excusa de desvestirlo. Sacando el máximo partido a esa ventajosa posición, le había rodeado el cuello con el antebrazo y aplicado presión a las arterias carótidas para obstruir el flujo sanguíneo que irriga el cerebro. Como esperaba, no tardó en perder la conciencia».
Lee y disfruta de un fragmento de la novela.
El autor:
César Pérez Gellida nació en Valladolid en 1974. Es Licenciado en Geografía e Historia por la Universidad de Valladolid y máster en Dirección Comercial y Marketing por la Cámara de Comercio de Valladolid. Desarrolló su carrera profesional en empresas vinculadas con el mundo de las telecomunicaciones y la industria audiovisual hasta que, en 2011 decidió dedicarse en exclusiva a su carrera de escritor.
César irrumpió con fuerza en el mundo editorial con Memento mori, que cosechó grandes éxitos tanto de ventas como de crítica y obtuvo el premio Racimo de literatura 2012. Constituía la primera parte de la trilogía «Versos, canciones y trocitos de carne», que continuó con Dies irae y se cerró con Consummatum est y por la cual le fue otorgada la Medalla de Honor de la Sociedad Española de Criminología y Ciencias Forenses 2014 y el Premio Piñón de Oro como vallisoletano ilustre. En 2015 publicó Khimera, su cuarta novela, y en 2016 inició su segunda trilogía, «Refranes, canciones y rastros de sangre», compuesta por las novelas Sarna con gusto, Cuchillo de palo y A grandes males.
Actualmente sigue escribiendo novelas y colabora como columnista en El Norte de Castilla.
El libro:
Todo lo peor ha sido publicado por el Sello Sima de Letras en su Colección Tinta Negra. Encuadernado en rústica con solapas, tiene 480 páginas.
Cómpralo a través de este enlace con Casa del Libro.
Como complemento pongo el booktrailer de la nueva novela de Cesar Pérez Gellida, “Todo lo peor”.
Para saber más:
https://perezgellida.es/