Sacan en un volumen los tres de Tinto de verano, artículos de Elvira Lindo en los veranos de 2011 a 2013. Un matrimonio de escritores pasan los meses de agosto en el pueblo. Ya les hablé del primero y del segundo, y del tercero no dije nada por no repetirme. Oralidad, humor (a veces chabacano y disparatado, siempre agudo e irreverente), ciertas vulgaridades y mucha gracia. Los andaluces conectaremos bastante con su guasa. Una comedia costumbrista basada en la propia vida de la autora que se ríe de las vanidades más comunes.
