Revista Cultura y Ocio

Tom Sawyer vs Huckleberry Finn

Publicado el 23 mayo 2009 por Jordan
Tom Sawyer vs Huckleberry Finn
Hay muchos factores que determinan que un libro te guste o no, tantos que no pienso ni intentar hacer una lista porque seguro que resultaría terriblemente incompleta. No sé cuáles de estos factores son los que hicieron que, desde un principio, me sintiera atraído por estos dos libros del genial Mark Twain, aunque intuyo que puede deberse a la cercanía de los personajes y de los hechos relatados.
Soy uno de esos que pasó su infancia durante los 80 y, además, al vivir en Cartagena, una ciudad pequeña (que a nadie se lo ocurra usar el término pueblo, je, je), y, en concreto, casi en la periferia, un porcentaje muy alto de este periodo de mi vida transcurrió en la calle. A día de hoy, eso es impensable. ¿Quién es tan inconsciente como para permitir que un chaval de seis o siete años salga por ahí a jugar con sus amigos? Pero entonces... Bueno, corto aquí que me voy a poner nostálgico. Lo cierto es que, los que hemos tenido la fortuna de disfrutar de una infancia no tecnológica, recordamos la infinitud de juegos y aventuras que llenaban nuestras horas de entretenimiento y nuestro cuerpo de cicatrices. La imaginación es el mejor aliado de un niño y un buen grupo de amigos su mejor juguete.
Pues bien, volviendo a Tom Sawyer y Huckleberry Finn, a pesar de que estos libros estén ambientados en otro siglo, otro país e, incluso, otro continente; uno no puede dejar de sorprenderse al comprobar cómo de cercanas te resultan las aventuras vividas por esta pareja inigualable. Ahora bien, aunque es complicado hablar de Tom sin nombrar a Huck y viceversa, estos dos aventureros no son, ni mucho menos, semejantes, y, por eso, sus libros tampoco lo son.
"Las aventuras de Tom Sawyer" es un libro cargado de humor y anécdotas de infancia. Es cierto que el señor Twain, maestro de la ironía, aprovecha hasta la más mínima oportunidad para dejar su impronta, pero, aún así, se trata de un libro más bien inocente en el que los protagonistas son los niños. Seguro que los que lo han leído recuerdan en especial alguno de los muchos momentos memorables: cuando la tía Polly castiga a Tom a pintar la valla y éste no sólo consigue que sean sus amigos los que realicen este trabajo, sino que encima le pagan por hacerlo; o la entrada triunfal de los niños desaparecidos en su propio funeral; o el juicio en el que Tom acusa al Indio Joe...
"Las aventuras de Huckleberry Finn" sin embargo, tiene un mayor contenido social. El racismo, las luchas familiares, los valores preestablecidos, la esclavitud, la amistad, entre otros, son algunos de los temas que se tratan en esta obra maestra. También este libro tiene sus momentos únicos: cuando Huck se disfraza de chica para conseguir víveres e información; la conversación con Jim sobre si los franceses hablan o no como seres humanos; el momento de debilidad en el que Huck está a punto de "hacer lo correcto" y entregar a Jim a la justicia...
Recuerdo que, en una clase de literatura norteamericana en la que el profesor estaba hablando de "Las Aventuras de Huckleberry Finn" y elogiando la figura del protagonista, alguien preguntó por Tom Sawyer a lo que aquel buen hombre, cuyo nombre he olvidado, respondió diciendo que Tom es un niño mimado para el que la vida es un juego, mientras que Huck es un superviviente. Tom busca las aventuras y "utiliza" a sus amigos para sus propósitos; Huckleberry lucha por vivir y las aventuras le salen al encuentro.
Quizá lo de tildar a Tom Sawyer de "niño mimado" es excesivo, pero, por lo demás, no me parece desarcertada la opinión de este profesor. Tom es un chaval con la imaginación desbordada y una gran cantidad de recursos. Continuamente esta buscando la manera de salirse con la suya y, como es un líder nato, suele llevarse a sus amigos detrás. Huck es un pobre crío, su madre murió cuando él era pequeño y su padre es un borracho y un criminal. Tom ha aprendido las reglas del juego y sabe cómo comportarse para evitar problemas; Huck es incapaz de atarse a esas normas: los trajes elegantes, los horarios, los libros... no son para él. Tom es el jefe de la pandilla, pero Huck es la envidia del grupo: no va al colegio, hace lo que quiere y cuando quiere, no tiene que obedecer a nadie...
He pasado muchas horas de la carrera estudiando estos dos libros, así que no creo que sea excesivo decir que nos encontramos ante unas grandes obras que ya han entrado en la lista de los clásicos. Sin embargo, aunque para un lector habitual resultan unas novelas amenas y divertidas, no me atrevería a recomendárselos a cualquier niño o joven que todavía no se ha curtido en la afición a la lectura. He comprobado varias veces que estas historias encandilan al público juvenil si se las cuentas, pero son pocos los que consiguen leerlas hasta el final.
En cualquier caso, si no has leído alguna de estas dos novelas, te recomiendo que lo hagas, no te arrepentirás.

Volver a la Portada de Logo Paperblog