Frenar no es malo. Frenar es necesario para tomar impulso. ¿Verdad?
Vivimos en un mundo tan voluble, tan lleno de prisa, tan cambiante y rodeados de ofertas que te dicen "Sólo por hoy", que nos resulta impensable el hecho de parar, de frenar, de no estar siempre en continuo movimiento.
Como si tuviésemos que estar ayudando a la tierra a seguir girando. Pero la tierra gira sin nuestra ayuda ¿verdad?
Motivos para frenar:
El principal motivo para frenar es darse cuenta de hacia dónde vamos o si realmente estamos en el camino correcto para llegar al destino deseado.
Nos ponemos el "piloto automático" y nos pasamos las horas y los días sin saber si estamos viviendo nuestra vida o simplemente seguimos un guion determinado: el papel de madre, el papel de novia, el papel de hija o el papel de esposa.
Hacemos lo que se supone que hay que hacer. Lo hacemos todo porque sí, porque es lo que se espera que hagamos. Y tan necesario es andar para avanzar, como pararse a descansar para seguir avanzando.
Párate a pensar:
La especie humana es demasiado compleja en cuanto fórmula de vida, puesto que hay miles de maneras diferentes de vivirla.
Y a pesar de tacharnos de "egoístas", muchas veces vivimos la vida que otros quisieran para ellos. No nos arriesgamos todo lo que nos gustaría simplemente por "qué dirán de mí".
Y lo que me ha pasado en estos meses ha sido eso.
Que decidí parar, puesto que ya no encontraba ni mi esencia. Me olvidé de mis propios sueños y deseos y dejé de creer en mí.
El agotamiento mental es tan malo como el físico, porque no te permite ni descansar, ni pensar con claridad. El agotamiento emocional es el que te obliga a poner "el piloto automático" y te empuja a caminar sin dirección concreta... Caminas porque sí, pero no sabes hacia dónde vas.
Abandoné muchísimo mi blog, que me reportaba tantas satisfacciones; por el simple hecho de no creer en mí. Porque empecé a dudar si merecía la pena seguir escribiendo.
Pero sé que todo llega. Y últimamente me han llegado muchas cosas respecto a mi faceta redactora.
Me han propuesto escribir un libro, han contactado para que realice una reseña sobre un nuevo artista, me han piropeado algunos que otros redactores de renombre y bueno, ¡Me lo creí!
Estoy segura que hay un "post viral" a la vuelta de la esquina (no me digáis que la tierra es redonda). Por lo tanto debo seguir escribiendo para ver si la suerte me acompaña.
Ser bloguer no es fácil.
Hace unos días me tropecé de nuevo con un post de el universo de lo sencillo, el blog de Pablo Arribas que se convirtió en un referente de blogs de "desarrollo personal".
Su post viral Sal con un valiente (que también en su día yo leí) fue el detonante del momento tan maravilloso que ahora vive. En menos de 2 años de existencia, su blog ha conseguido posicionarse entre los mejores de su categoría.
Su libro va ya por la tercera edición y estoy segura de que detrás de la tercera vendrán muchas más ediciones.
¿Qué ha hecho él que no haya hecho yo? (Además de escribir un super artículo en el que nos cuenta cómo buscar una pareja que nos quiera)
Pues probablemente se lo ha currado mucho más y en algún momento se habrá parado a pensar qué hacer, para después tomando impulso , llegar mucho más lejos de lo que pudo imaginar.
Todos los que nos dedicamos a este mundo de las letras, soñamos con redactar un post viral que nos cambie la vida.
Yo estoy tomando impulso porque sé que ese día está más cerca. Si es difícil de conseguir ese objetivo escribiendo un post a la semana, mucho más difícil sería conseguirlo si dejo de escribir ¿Verdad?
Pues me he puesto manos a la obra como si empezase de 0 con el blog y por supuesto me puesto una tarea que no puedo retrasar: ¡Tengo que migrar a WordPresss.org.!
Así que voy a ver el lado bueno de mi descanso como blogger estos últimos meses, en los que apenas escribía y os diré que quizás haber parado es lo más adecuado para continuar...El tiempo dirá.