La ingesta de alcohol durante el embarazo y la lactancia puede provocar problemas en el desarrollo del niño. Así lo ha indicado la secretaria autonómica de la conselleria de Sanidad, Nela García, quien ha indicado que "la evidencia científica sobre la relación entre el consumo de alcohol y los numerosos perjuicios sobre la salud de la embarazada, el nonato y el recién nacido, así como sus repercusiones en el desarrollo social del niño, es incuestionable".