Revista Salud y Bienestar

Tomar el Sol: el mejor protector solar

Por Míriam Lihi

Tomar el Sol: el mejor protector solar

Ahora que ya empieza a hacer mejor tiempo y apetece ponernos un rato bajo los cálidos rayos del sol es bueno recordar que debe hacerse con moderación y con protector solar.

No tenemos que escondernos siempre del sol porque es necesario para nuestro organismo tomar el sol, pero debidamente protegidos. Si nos exponemos al sol sin una adecuada protección estaremos perjudicando nuestro cuerpo tanto a corto como a largo plazo. Pero no sirve cualquier protector solar ni cualquier forma de aplicarlo. Aquí verás cómo debes hacerlo para que realmente te sirva.

Entre los puntos a favor que este astro nos aporta está el de sintetizar Vitamina D o el de reforzar nuestro sistema inmunológico. Por no hablar de los beneficios en nuestra piel en casos de vitiligio o psoriasis. Además, actúa de forma positiva sobre nuestro estado ánimo dándonos más vitalidad y energía y haciendo que nos sintamos mejor, y esto se debe a su efecto sobre los neurotransmisores de nuestro cuerpo.  Pero no todo es siempre así de bonito y tiene su parte negativa como las quemaduras o eritemas si hablamos de efectos negativos a corto plazo e incluso vómitos, náuseas, fiebre, pérdida del conocimiento…en casos más extremos de exposición solar. En estos casos se debe acudir rápidamente al médico.  Otro de los problemas de la exposición al sol es que a parte de estos efectos negativos  corto plazo también causa efectos a largo plazo produciendo alteraciones degenerativas del tejido conjuntivo de la dermis. Se ha demostrado que el 80% del envejecimiento de los seres humanos se debe a la exposición solar y es una de las principales causas de aparición de cáncer (cáncer de piel).  Cuando busquemos un protector solar tenemos que tener presente dos tipos de protección, la UVA y la UVB. 

¿Qué tienen de diferente estos tipos de rayos ultravioleta y cómo nos afectan? 

Los rayos UVA son más intensos que los UVB y afectan las capas profundas de la piel. Cuando hablamos de protección UVB nos referimos a la protección de los solares ante las quemaduras o reacciones de la piel ante la exposición solar y los UVB hace referencia al efecto de los rayos sobre las capas profundas de la piel que afectan a nuestro envejecimiento y manchas, para decirlo de una forma más general.  Otra cosa importante a saber y que pocas veces se suele comentar es que la protección que sale en los productos que se venden es la protección frente a los rayos UVB (quemaduras y reacciones solares) pero no la UVA. Y cómo sabemos la protección UVA, pues recordando que siempre es 1/3 de lo que proteja la UVB. Es decir, que si cogemos una crema de protección 50 nos estaremos protegiendo un 50 de los UVB y un 16,666667 frente los rayos UVA.  ¿Qué hay que sacar en claro de esto que acabo de decir?  Que aquellas personas que quieran protegerse del sol por tener manchas o para que no le aparezcan y para reducir el efecto de envejecimiento que causa el sol deberán optar siempre por cremas que ponga 100+. A parte de la protección solar también hay que recordar que es aconsejable el uso de otras medidas de protección como:
  • No exponernos al sol entre las 10h de la mañana y las 16h de la tarde.
  • Usar protección incluso cuando vamos a pasear en días nublados. Ni la niebla ni las nubes nos protegen de los rayos del Sol. 
  • Además, hay que recordar que cuanto mayor sea la altitud, más rápido se quema la piel con el  sol. Y más aún cuando empieza el verano porque es cuando los rayos UV pueden causar el mayor daño de la piel.
  • Evitar superficies que reflejen la luz, tales como el agua, la arena, el concreto, la nieve y las áreas pintadas de blanco.
  • Utilizar pamelas, gorros, gafas solares, camisetas y ropa blanca…Recordad que las gafas deben proteger tanto de los rayos UVA como UVB.
  • No utilizar lámparas de sol ni camas para broncearse (salones de bronceado). Pasar de 15 a 20 minutos en un salón de bronceado es tan peligroso como pasar un día al sol. En el vídeo podéis ver que es una de las primeras causas de cáncer tanto en mujeres como en hombres.
Es importante recordar que debemos ponernos el protector solar varias veces al día, por lo general cada hora y media o cada dos horas. Y más en caso que nos metamos en el agua. Y es recomendable que nunca usemos protectores inferiores a 30 FPS. No se trata sólo de evitar quemarnos sino de proteger nuestra piel y nuestro organismo. 

Hay en el mercado protectores solares con antimosquitos junto pero es mejor no utilizar este tipo de productos porque el protector debe aplicarse varias veces al día y sin embargo el repelente no debe usarse muchas veces. Es contraproducente.

En caso que exista sensibilidad a los protectores solares se puede utilizar uno mineral como el óxido de zinc o dióxido de titanio.

Hay que utilizar protector solar siempre que se salga a la calle, no sólo cuando se quiera ir a la playa o a tomar el sol. Si vamos andando por la calle o nos sentamos a tomar algo en una terraza también nos toca el sol y afecta igual que si estuviéramos tirados bajo el sol a la orilla del mar. Y siempre se debe poner 30 minutos antes de salir a la calle para que tenga efecto. Es el tiempo que necesita la piel para absorber el protector y que así pueda proteger. 

No debemos olvidar los labios, que también tenemos que protegerlos. Hay muchos labiales que llevan protección solar así que podemos hidratar, reparar y a la vez proteger nuestros labios. 

Hoy en día hay muchos productos en el mercado que contienen varias fases y por eso se deben agitar antes de usar, para que las fases se mezclen y hagan efecto. Esto es importante saberlo para cuando tengáis que aplicaros el protector solar. Mirad siempre si se debe mezclar el producto antes de su aplicación para un uso y protección correctos.

Espero que pongáis en práctica los consejos antes de tomar el sol!!! Cuidad vuestro cuerpo, cuidad vuestra salud

🙂


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