¿Tomar o no tomar esa decisión?

A todos nos ha pasado en más de una ocasión que no sabemos que decisión tomar, desde decidir si irnos por un camino o por el otro en la calle hasta elegir si casarnos o no….En la vida siempre vamos a tener que estar tomando decisiones todo el tiempo aún cuando optamos por no hacer nada ya estamos eligiendo.

Cuando nos encontramos confundidos por no saber que decisión tomar, debemos de tener en cuenta dos cosas: nuestra intuición y la razón. Muchas veces cuando nos ocurre alguna situación o nos ponen a elegir entre dos o más opciones, de manera inconsciente ya hemos tomado alguna decisión, la cual a la hora de actuar se ve afectada por la razón, llamemos razón a nuestras ideas, valores, nuestra forma en general de ver la vida, de emitir juicios para saber según nuestras creencias que es lo correcto e incorrecto, entre otras cosas que nos han sido inculcadas toda la vida.

Nuestra intuición está ligada a nuestras emociones y cada vez que sentimos alguna emoción del tipo que sea, una parte de nuestro cuerpo se activa y la reciente, debemos de aprender a identificar estas emociones en nuestro cuerpo, por ejemplo en una situación donde nuestra intuición detecta que podríamos estar corriendo peligro tal vez sea nuestro estómago el que lo recienta y podamos tener una pequeña sensación de dolor. Aunque parezca que no es tan importante, el darnos cuenta de como reciente nuestra cuerpo cada tipo de emoción y en que parte se encuentra ubicado es de gran ayuda para orientarnos en la decisión que debemos tomar.

Entonces pareciera que tenemos dos opciones, hacer caso a la razón o a la intuición, de primera instancia puedo decirte que si aprendemos a desarrollar cada vez mas nuestra intuición, como lo explico en el párrafo anterior, detectando nuestras emociones, con el paso del tiempo podremos volvernos más acertados y seguros de nuestras decisiones, pero en lo que esto sucede…..  ¿Porqué no aprender a combinar ambas? Esto nos ayudaría a reducir nuestra ansiedad e ir poco a poco aprendiendo a confiar en nosotros mismos. Si te encuentras en una situación “extrema” en cuanto a que la toma de alguna decisión crees que podrá marcar tu vida de manera significativa, analiza con detalle los beneficios que esta puede traer a corto y largo plazo, así como también los contra que esta trae consigo igualmente a corto y a largo plazo. Muchas veces una “mala” decisión puede convertirse en  algo muy bueno a largo plazo. Después de haberlo analizado de esta manera, trata de identificar como te hace sentir cada una de las situaciones y haz una balanza.

Recuerda que en algunas veces podría ganar la razón y en otras la intuición, eso no lo sabremos hasta no estar inmersos en la situación, lo importante es tomar la decisión que más nos haga sentir seguros y estar conscientes de que no siempre vamos a tener el resultado que esperamos cuando no se encuentra en nuestras manos y cuando es así debemos tomarlo como un aprendizaje, como ya lo mencioné antes, muchas veces una “mala” decisión puede convertirse en algo muy bueno a largo plazo incluso también en un plazo menos largo ¿Porqué no?

Psic. Marissa Glover Aguilar

Contacto: Twitter: @m_glover21                      Skype: marissagloveraguilar

Correo: marissa.g.a@hotmail.com