¿Os acordabais? En este blog también hablaba de manga bastante seguido, comentando mis últimas lecturas, pero la pereza de acumular varios tomos ha ido dejando de lado Tomo a Tomo... pero hoy la recuperamos.
En Tomo a Tomo os hablaré de mis últimas lecturas en cuanto a cómic se refiera, ya sea manga o cómic europeo, a ser posible por tomos sueltos, en las que os comentaré mis impresiones, vaticinios de lo que está por venir y, sobre todo, haré algo inaudito como dejar que los spoilers campen por sus anchas en la entrada.En esta segunda entrada, os comentaré mis últimas lecturas, que son continuaciones, así como una serie nueva y un tomo único. ¡En esta sección darán cabida tanto resúmenes como spoilers, estos últimos bien señalizados!
Empiezo con el primer shojo que he empezado en 2015, los tomos 1, 2 y 3 de Namida Usagi, de Ai Minase, que ya conocía de hacía unos años e incluso había picoteado un par de capítulos, pero con su publicación de la mano de Ivrea, me he animado a retomarla. Con el subtítulo de "Historia de un amor no correspondido", esta historia puede recordar a otro shojo ya finalizado por la misma editorial, pues sigue muchas de esas pautas, aunque personalmente, no le llega ni a la suela del zapato. Namida Usagi es, ante todo, muy tierna donde prevalecen los sentimientos y la pureza de sus personajes. De esos shojos que lees encantada porque te reblandecen el corazón y te hacen soñar con los atolondrados tiempos de adolescentes. Tenemos a una pueril protagonista que se enamora de su compañero de pupitre y juntos tienen una relación de amigos que podría ir a más, pero siempre surgen los típicos contratiempos de este género. Tras leerme los tres tomos, puedo aseguraros que comete perfectamente el cometido de engancharte y devorar cada página esperando que él se decida a dar el paso, pero tampoco nos estamos perdiendo la séptima maravilla al no leerlo.Entrando ya un poco en materia y comentando los giros de la novela, era de esperar que Narumi tuviera un pasado turbulento y una novia a cuestas, pero Momoka a veces peca demasiado de pánfila y hasta se hace pesada con querer ser su amiga pero sin poder renunciar a sus sentimientos Sí, no es la primera vez que vemos esta relación, pero en otras, como en Strobe Edge, se respiraba un poco más de alma; aquí, simplemente, Momoka repite las mismas palabras de ánimo y consuelo sin dejar de suspirar por él.¿Seguiré leyéndola? Claro, por qué no. Tiene todos los ingredientes de enganche de un shojo, pero espero que aparezca su propio camino más adelante.
Sigo ahora con la obra maestra de Los Dioses mienten, de Kaori Ozaki, tomo autoconclusivo y apuesta segura si buscáis una historia tierna pero desgarradora. Todo un acierto por parte de MilyWay Ediciones.No, no os voy a hablar de otro romance más, porque es un tomo con sorpresa. Lo mejor de esta lectura, sin duda, ha sido el giro inesperado, el grito ahogado tras descubrir el horror que acecha una inocente amistad entre dos niños. Cuesta sorprenderme con mis lecturas, y vaya si lo ha hecho Los Dioses mienten.
En un primer momento, parece un manga más, otro shojo amistoso donde un chico y una chica se conocen y surge algo indescriptible, un sentimiento entre la amistad más férrea y el romance más honesto, de esos que hacen historia, pero no. Estamos ante una historia muy adulta, de dos niños que deben crecer cuando deberían disfrutar de su niñez, pero que nos hace enfrentarnos a nuestra propia realidad y, como bien dice el título, a descubrir que los dioses mienten, porque la vida siempre guarda sorpresas.
Me dolería mucho destripar todo lo que podréis encontrar en Los Dioses mienten, pues ni yo misma me atrevo a hacerlo público, porque es un manga que ha de leerse a ciegas. Un manga que te hace enteramente suyo, mientras te obliga a enamorarte lentamente de los personajes, de su día a día, de la tierna amistad que parece madurar con el tiempo, para después aplastarte con una realidad que estaba ahí pero no queríamos reconocer. Te destroza por completo y te hace recordar, una vez más, la maldad humana.Si buscáis algo diferente, algo único, corto pero de intensidad aplastante, Los dioses miente es vuestra lectura.
Y ya para terminar, otra gozada: Hideout, de Masasumi Kakizaki, otra estupenda licencia de Milky Way Ediciones.
Soy muy muy aficionada al terror al gore, pero aún no estoy al día con este género en viñeta, y descartando las sagas interminables o el par de seinens que están entrando con potencia, pero de tanto en tanto, siempre estoy ávida de nuevas historias y sensaciones. Y Hideout, tras su lectura, os lo aseguro, apetece. Es intenso y acongojante.
El dibujo es soberbio y es necesario pararse en más de una página para saborear las caras de puro terror de los personajes o los escenarios, pero ante todo es de agradecer que sea una historia relámpago, bien estructurada y sin ningún cabo suelto, que no deja nada al azar y todo está conectado. Obviamente, Hideout no sería lo que es de no ser por el peso aplastante de los sentimientos, la manera de actuar de todos, siempre llevados al límite por el escenario creado por Kakizaki. Toda una maestría, pues no siempre en ciertas obras de terror, podemos asustarnos de las capacidades humanas. Empezando por la agresividad de nuestro escritor protagonista, convencido en matar a su mujer para cambiar de vida, hasta los deseos inocentes del niño por reencontrarse con su madre... Y no digo más.
Eso sí, algo malo debía ver: aunque la historia me ha encantado, porque he leído poco de este estilo en viñeta, la historia no se aleja demasiado a cualquiera cinta de terror actual. Ciertos hechos eran más que previsibles, incluso el final, aunque alabo ese desenlace que desembocaría a un círculo vicioso. Y no digo más.
¿Habéis leído alguno de estos mangas? ¿Qué os han parecido?