El próximo fin de semana el Head Coach Tony Dungy, quién desarrolló una gran defensiva en Tampa Bay e hiciera campeón del Super Bowl XLI a Indianapolis, será inducido al Hall of Fame. Pero, ¿crees que haya merecido el nombramiento?
Sin duda Tony Dungy no fue un personaje del todo carismático dentro de la NFL. Su corta carrera como jugador no puede ser considerada brillante ni está cerca de serlo. Jugó como quarterback en su carrera colegial pero no contaba con el peso ni la estatura que los equipos buscaban al final de la década de los 70’s. Incluso no era su fuerte ser un quarterback dentro de la bolsa de protección. Tuvo que soportar la desilusión de no ser seleccionado en 1977.
A pesar de tener ofertas en la liga canadiense, su meta era jugar para una franquicia de la NFL. Tendría que adaptarse o perder el sueño. Los Bills le ofrecieron probarse como safety pero gracias a que Tom Moore, quien fuera su Coach en la Universidad de Minnesota y quien ya formaba parte del staff de Chuck Noll en Pittsburgh, hiciera la recomendación sobre la clase de jugador y lo que podría aportar al equipo, Dungy obtuvo una oportunidad para probarse.
Y no la desperdició. Tuvo que comenzar como wide receiver en el campo de entrenamiento hasta que las lesiones de algunos jugadores lo hicieron moverse como safety. Steelers era un equipo muy completo y no necesitaba más quarterbacks ni wide receivers, incluso tampoco safeties, pero nunca quitó la mirada de su objetivo. Finalmente Tony Dungy se quedó en el roster final de aquel año.
Tuvo sus anécdotas dentro de Steelers. La que más me gusta es aquel dato curioso en donde tuvo que jugar como quarterback en Houston, tras lesionarse Terry Bradshaw y el backup Mike Kruczek. Steelers salieron a jugar con solo dos quarterbacks en el roster activo por lo que tuvieron que recurrir a Dungy quien lo hizo terrible. Lanzó un par de intercepciones esa ocasión, incluso soltó el balón. Nada para presumir. Con su previa actuación defensiva donde había conseguido interceptar un pase, Tony se convirtió en el último jugador en la historia de la NFL en interceptar y lanzar una intercepción.
Fue parte del equipo campeón del Super Bowl XIII y al siguiente año fue enviado a San Francisco donde Bill Walsh se estrenaba como Head Coach dentro de la NFL. No fue un gran año después de haber conseguido dos victorias y tampoco lo fue para Dungy aunque la experiencia de aprender de Noll y después de Walsh, debe ser muy enriquecedora. Sobre todo para su futuro como entrenador.
En 1980 fue cambiado con los Giants pero no pudo quedarse en el roster final. En aquel equipo el Head Coach era Ray Perkins quien tuviera unas palabras que resultaron proféticas. Dijo: “Tony, eres un tipo muy inteligente y tienes una buena visión del juego. Creo que podrías ser un buen entrenador algún día.” Al final de la Temporada 1980 el equipo de Denver le hizo una oferta pero Dungy pensó que era tarde y así fue como concluyó su carrera como jugador.
Claro que esa no es la razón por la que se convertirá en Hall of Famer.
Para el siguiente año, el Head Coach Perkins lo invitó a formar parte de su staff de entrenadores y Dungy aceptó aunque nunca llegó a ser parte de los Giants. El dueño de los Giants, Wellington Mara hizo el comentario a su amigo Art Rooney que sería gracioso que ahora contarían con un ex Steeler como parte de su staff de entrenadores. Rooney llamó a Noll quién a su vez se comunicó con Dungy para decirle que si quería ser entrenador, los Steelers tenían un lugar para él y hacer cosas interesantes. Tony aceptó regresar a Pittsburgh.
La historia de Dungy como entrenador comienza cuando tenía 25 años. Muy joven hasta para los estándares en la actualidad. No tardó mucho tiempo para que se convirtiera en Coordinador Defensivo de los Steelers.
Si bien esa época fue el fin de la Dinastía de los setentas en Pittsburgh y no tuvieron en los ochentas las mejores temporadas, Tony fue responsable de seleccionar a jugadores que se convirtieron en líderes y grandes defensivos. En el Draft de 1987, Steelers seleccionó a Rod Woodson, Delton Hall, Thomas Everett, Hardy Nickerson y Greg Lloyd. En 1988 renunció al equipo de Steelers cuando Noll le pidió volver a ser entrenador de la defensiva secundaria.
No tardaron en llegar las ofertas para Dungy. Me habría gustado ver el rostro de felicidad al recibir ofertas de equipos contendientes de la época como los 49ers, los Giants y los Bengals. Además de ellos, Los Chiefs también le hicieron ofertas mediante el recién llegado Head Coach Marty Schottenheimer. Finalmente decidió que Kansas City sería su destino.
Tres años sirvió como entrenador de los Chiefs hasta que Bill Cowher, coordinador defensivo del equipo, tuvo la oferta de parte de Pittsburgh para remplazar al legendario Chuck Noll. La opción obvia era que Dungy se quedara con la vacante dejada por Cowher pero Marty no pensaba así. Afortunadamente para Dungy, Dennis Green le ofreció el puesto de coordinador defensivo en Minnesota.
Me parece que la estancia de Dungy en Minnesota vino a enriquecer su experiencia y conocimientos sobre el football americano en la NFL. De hecho fue ahí donde nacen los principios de la defensiva llamada Tampa 2 que se popularizara años después cuando Dungy se convirtió en Head Coach de Buccaneers.
Él junto con Monte Kiffin en Minnesota hicieron una defensiva híbrida de lo que se utilizaba en el equipo con una muy buena línea defensiva enfocada a presionar atacando los huecos de la línea ofensiva, con las bases de la defensiva Cover 2 que Steelers tenía en los setentas quienes cubrían el pase por zonas.
Nunca brillaron los Vikings de aquella época a pesar de contar con una buena defensiva. Posiblemente su falta de éxito en playoffs opacó el trabajo de Dungy.
Pero en 1996 vino la oportunidad de ser el Head Coach en Tampa Bay y transformó a una de las franquicias más grises y perdedoras de la liga en un equipo contendiente dentro de la Conferencia Nacional. Y por su puesto que la firma de Dungy fue la defensiva.
Uno de sus mayores logros dentro de los Bucs fue aquella final de Conferencia ante los Rams con su explosiva ofensiva llamada “The Greatest Show on Turf”. Esa ocasión la defensiva de Tampa Bay permitió 11 puntos a Kurt Warner y compañía. Desafortunadamente los Bucs sólo consiguieron 6 puntos y fueron eliminados de sus aspiraciones al Super Bowl.
Dungy dejó a los Bucs en 2001 pero su trabajo se notó a pesar de su salida cuando el equipo en la Temporada 2002 fuese el campeón del Super Bowl.
En 2002 Dungy tomó el puesto como Head Coach de los Colts y posiblemente aceptar ese trabajo le haga una de las mayores injusticias en su carrera. Siempre vivirá con las dudas de mucha gente por el hecho de tener a Peyton Manning como el quarterback en Indianapolis y quién ha sido uno de los mejores jugadores en su posición en la historia de la liga. Sin embargo, yo no le quitaría el mérito. En cuatro de sus siete temporada al frente de los Colts tuvieron defensiva Top 10 y eso nunca será gracias a Manning.
En su estancia en Indianapolis, Dungy atravesó uno de los peores momentos en su vida. Una llamada en la madrugada del 22 de diciembre de 2005 le avisarían que su hijo Jamie se había quitado la vida. Seguramente un momento devastador para él y su familia. Ese evento pudo haber hecho pensar a cualquiera en el retiro pero no para Tony. En 2006 consiguió que los Colts volvieran a ser campeones de Super Bowl y después de dos temporadas, no volvió a entrenar y se retiró.
Muchos equipos han buscado sacarlo del retiro pero Dungy ya no tuvo el mismo interés.
Sus objetivos fueron siempre claros y parte de su filosofía que implementaba en sus equipos era:
- Top 5 en diferencial de entregas de balón y balones recuperados.
- Top 5 en ser el equipo menos castigado.
- Top 5 en equipos especiales.
- Hacer grandes jugadas
- No permitir grandes jugadas.
Un tipo religioso quién creía que hablando y no discutiendo podría obtener mejores resultados. No cabe duda que se guió fuera de los estándares del deporte y de la liga.
¿Es merecida su inducción al Hall of Fame? Es debatible y siempre lo será pero si vemos la cantidad de jugadores que fueron seleccionados e influenciados en los equipos en los que él participó como entrenador de posición, como coordinador defensivo ó como Head Coach, creo que debe ser parte del distinguido grupo de personas que hicieron esta liga una de las mejores.
Sin duda fue un líder con un estilo propio y que veo improbable que se repita en los próximos años.
Aunque para muchos expertos y fanáticos no es del todo justa la nominación, .