El cine de acción pierde a uno de sus grandes
El publicista de Scott ha confirmado a varios medios estadounidenses como The Wrap que el realizador de 68 años ha fallecido, aunque no han querido aclarar las circunstancias del suceso que tuvo lugar ayer a las 12:30 (21:30, hora española) en la localidad californiana de San Pedro. No obstante, los agentes encargados del caso, así como diversos testigos, han asegurado que el realizador se arrojó desde el puente Vincent Thomas, que une al pueblo con la isla de Terminal, tras escribir una nota de suicidio que fue encontrada momentos después en su coche. El portavoz del departamento de Bomberos de Los Ángeles ha comunicado que se ha recuperado el cadáver a las 4:30, hora local, gracias a la utilización de un sonar, pero no ha querido confirmar la hipótesis ya asentada entre la prensa del suicidio.
Hermano de Ridley y compañero suyo en la productora Scot Free, Tony Scott se negó a vivir a la sombra del director de Gladiator y prefirió especializarse en un género, el de acción, que el cineasta ayudó a concebir tal y como lo entendemos hoy en día de la mano de otros realizadores como John McTiernan, Phillip Noyce o Richard Donner. Títulos como Top Gun, El último Boy Scout, Amor a Quemarropa, Marea Roja o Enemigo Público son solo unos ejemplos de una filmografía que alcanza la veintena de títulos dirigidos y más del doble como productor. Su último esfuerzo en la realización lo encontramos en la digna Imparable, aunque fue en El Fuego de la Venganza en 2004 cuando nos regaló su última joyita cargada de fuegos artificiales a ritmo endiablado. Descanse en paz.