La publicidad digital, a pesar de algunas tendencias recientes, sigue siendo un gran negocio; y los administradores de sitios web lo saben muy bien.
Las marcas están realizando una transición de los medios tradicionales hacia el escenario digital.
Lo anterior significa más presupuestos, pero también se incrementa el riesgo de fraude.
Y es que según estadísticas de la Association of National Advertisers:
11% de los anuncios mostrados y casi una cuarta parte de los vídeos son vistos por software y no por personas.
En complemento el sitio Forrester sugiere que en el 2016 al menos $7.4 billones de dólares fueron desperdiciados en anuncios que obtuvieron vistas consideradas como fraudulentas.
Las técnicas más comunes para realizar el fraude son dos:
- El uso de hitbots, que son programas que hacen clics en los anuncios de manera automática, por supuesto, cuesta dinero al anunciante pero jamás se concretará una venta.
- Ad stacking. Consiste en vender múltiples veces el mismo espacio destinado a un anuncio digital dentro de un sitio web. Cada anuncio vendido ocupa un nivel superior al anterior. Los anuncios obtienen datos de que se generan impresiones pero los usuarios sólo ven los anuncios que están en el primer nivel.
La siguiente imagen creada por Statista muestra datos reveladores al respecto:
- En Japón, la probabilidad de que tu anuncio tenga visitas fraudulentas es del 80%.
- El top 3 lo complementan Brasil y Estados Unidos con 38% y 37% de probabilidad respectivamente.
- El último de la lista, el lugar 7 es para España con un 16%.