Los detalles son los que te acaban delatando.
Respeto, ¿dónde te escondes?
Respetar no es callar ni mantenerse al margen. Eso sólo es una elección que cada uno toma según si le interesa participar en el juego o no, ni mejor ni peor…Algo es mejor o peor que otra cosa cuando utilizamos el juicio, cuando comparamos…y siempre lo hacemos desde nuestra perspectiva, desde nuestras creencias, desde nuestra mente, desde nuestro ego…
Se puede hablar, dar una opinión, dialogar, conversar, debatir…desde la humildad (que también debe estar hibernando..), desde la escucha, desde la Aceptación y el Saber que el Ser Humano no tiene ni idea de nada en absoluto de lo que pueda estar sucediendo en la Realidad, de lo que es Verdad y de lo que no lo Es…y que por mucho que investigue, por muchos conocimientos que acumule, por muchos descubrimientos que haga…la Tierra “será plana o redonda o elíptica o sin forma” según el instrumento con el que la esté observando. Y teniendo en cuenta que utilizamos el 10% de nuestro cerebro (o no..), ¿para qué querer averiguar de dónde vengo o a dónde voy, si hay 10 dimensiones o 40, 7 chakras o 70…si el resultado estará basado en un 90% de “Ignorancia”?
Si fuésemos Honestos…la respuesta a prácticamente cualquier pregunta sería: NO SÉ.
¿Sabes cómo te vas a sentir en un minuto? ¿Sabes qué te sucederá mañana? ¿Sabes que hay después de la muerte? ¿Sabes si estás vivo o estás soñando? ¿Sabes cuántos planetas vuelan por ahí arriba? ¿Sabes si hay niños muriéndose de hambre o guerras en proyecto o apocalipsis acercándose? ¿Te Crees todo lo que ves, todo lo que te cuentan, todo lo que escuchas…da igual de quién proceda? ¿Sabes si Jesús o Siddharta Gautama existieron? ¿En algún momento te cuestionas si la Historia es real? ¿Qué certeza tienes de que lo Es o de que no lo Es? ¿Está escrito? ¿Lo han canalizado? ¿Estás seguro..?
“Está comprobado científicamente que..” Científicamente…¿desde nuestra pobre evolución?
Pero claro, si NO SABEMOS nada, si dudamos de todo, si no Creemos…¿qué pasa? ¿Se acaba el mundo? ¿Se para el tiempo? ¿Nos desintegramos..? NO. Lo que pasa es que deja de interesarte “la ciencia” y empieza a interesarte la Vida. Y la única manera de conocer la Vida es conocerse a uno mismo…Porque nosotros Somos La Vida.
La paradoja…es que tampoco jamás lograremos conocernos porque estamos continuamente cambiando, transformándonos, moviéndonos…aunque estemos en el mismo lugar, a la mismo hora y con la misma gente…
Cuando me preguntan cómo eres…NO SÉ qué decir…porque “depende”. Puedo coincidir muchas veces en un tipo de energía…pero eso no Soy yo. Mucha gente se sorprende de la actitud de una persona porque dan por hecho que actuará de cierta manera….cuando NO SE SABE cómo vamos a reaccionar ni qué vamos a Sentir…y ahí es cuando vienen las sorpresas…”Creía que te conocía” “Has cambiado” “Ya no eres el mismo”. ¿Acaso tú sí..?
Queremos encasillarnos en un nombre, una raza, una cultura, una identidad, un ying o un yang, un terrenal o espiritual, un carnívoro o vegetariano, un machista o feminista, un de derechas o de izquierdas…Y ahí perdemos toda nuestra Esencia. Preferimos la seguridad que te da una Etiqueta a la inseguridad que te aporta la Libertad de Ser, hacer, decir, pensar y sentir lo que surja en cada momento, sin tener que dar explicaciones, sin tener que estar justificándote, sin tener que rendirle cuentas al “jefe”.
Preferimos ser marionetas, títeres que Ser el que mueve nuestros hilos (cada uno los suyos). ¿Por qué..? Porque si elegimos ser nuestros propios Maestros debemos lidiar con la RESPONSABILIDAD, con la coherencia, con la honestidad, con la valentía y con el Respeto por uno mismo. Y para eso hay que estar dispuesto a mirar de frente a nuestras sombras, nuestros miedos, nuestros complejos, nuestras inseguridades, nuestro día a día, lo que y quién nos rodea, nuestra “historia”, tomar decisiones y bailar con ellas mientras caminamos. Pero es más fácil que nos hagan “el trabajo”…así si me equivoco la culpa es del otro y no me siento tan mal. “Yo solo hago lo que me dicen. Es lo que me ha tocado. A mí que me registren… bla bla bla “.
Y nos “hacemos” pro-animales, pro-gaia, pro-salvemos al mundo, pro-unidad…Salimos a la calle, sacamos nuestras pancartas de frases bonitas de color de rosa, nos subimos al podium, damos un discurso salteado en lágrimas y cantamos el Himno de la alegría todos juntos. Nos cogemos de las manos, nos emocionamos, nos conectamos, nos entendemos, nos hermanizamos…y cuando llegamos a casa, al trabajo, a nuestro barrio…nos quitamos la careta y empezamos a poner verde al vecino, a nuestra pareja, a nuestros padres, a nuestros compañeros…a nosotros mismos…
Qué pronto se nos olvida eso del AMOR…
No queremos que el toro sufra pero nos da igual que el torero se desangre. Y si se muere, mucho mejor. Él se lo ha buscado. Uffff…
Y nos hacemos llamar Seres Humanos, Espirituales…cuando en lugar de saltar al ruedo saltamos directamente a la yugular…
Desde el odio, desde la guerra, desde el miedo, desde la necesidad, desde la prepotencia, desde nuestras heridas, desde la intolerancia, desde el ataque o desde la defensa…jamás conseguiremos la Paz.
Si perdemos el RESPETO lo perdemos todo.
¿Quieres salvar a los Bosques, a los Animales, al Planeta, al Universo, al Futuro Entero?
Sálvate a TI
y así…quizás, sólo quizás…
dejarás de Ver el Peligro Ahí aFuera