Tormentas de verano

No estoy demasiado inspirada hoy para escribir un cuento sobre la lluvia, ni sobre el olor de la lluvia, ni sobre los motivos por los que a veces sólo vemos lluvia. De hecho, voy a dejar ahora mismo de hablar de ella, porque hace un calor de mil demonios aquí, y lo único que desearía ahora es que cayera un tormentón de verano, de esos que lo refrescan todo y dejan aroma a tierra mojada.

CHiCoTRiSTe se inventa un conjuro contra la tormenta...(por LeTiHH.)

 A CHiCoTRiSTe tampoco le gusta nada mojarse los zapatos cuando no le apetece. Pero, claro, es que a CHiCoTRiSTe lo que le ocurre es que le han roto el corazón antes de ayer, y así es imposible ver nada claro. Seguro que dentro de un tiempo anda riendose de los charquitos sin acordarse de ese maldito día de tormenta en que creyó que jamás volvería a ser verano…