Revista Arquitectura
Construida en Moscú, la torre Mercury-City, ha superado en 29 metros al que hace pocos meses, tuvo el honor de ser el edificio más alto de Europa, The Sard en Londres. Con una altura de 338 metros, la torre se convierte en el rascacielos más alto de todo el continente europeo.
El Mercury-City además de destacar por sus dimensiones, también lo hace por su caprichosa geometría que dota de una singular originalidad al edificio. Además, su acristalamiento de color cobre, otorga al volumen generado por los planos descritos por las múltiples fachadas, un espectacular juego de luces y destellos provocados por los rayos de sol al incidir sobre su fachada, en especial durante el ocaso.
Finalizada el pasado mes de noviembre, cuenta con un total de 75 plantas, que han sido ocupadas por comercios, oficinas y apartamentos de lujo. Éstos últimos están instalados en las plantas superiores.
Mas Información en: en.mercury-city.com