Revista Salud y Bienestar
" Echarle la culpa de tus errores a tu naturaleza no cambia la naturaleza de tus errores". (Thomas Harris)
LA CULPA
La culpa a nivel psicológico, constituye el sentimiento de responsabilidad provocado por una acción u omisión producto de daños causados a otros o en sí mismo. En el ámbito espiritual, la culpa se presenta como consecuencia del pecado, al poder discernir la persona entre el bien y el mal.
En realidad, pueden distinguirse dos culpas: una llamada real, propia del pecado del hombre al trasgredir las leyes y mandatos divinos; y la culpa ficticia, aquella que surge de dificultades de la niñez, incluso la juventud.
La culpa como tóxico emocional se refiere a la tendencia de la persona a ver sus comportamientos y acciones, en general, como censurables y dignos de condenación por parte de otros.
En la vida interior de esta persona tal vez reposen residuos de censuras, condenas y recriminaciones que sus padres o cuidadores le hicieron frente a acciones que en realidad no presuponían experimentar culpa. Por ejemplo: cuando un niño cae al suelo, debe asumirlo como un suceso normal, pues todos los niños tropiezan; pero ello no es motivo para hacerle sentir al niño torpe o falto de habilidad, pues esto produce culpa innecesaria.
En la vida presente, las personas vacilan en sus actuaciones, pensando si están bien o mal, si serán aprobadas o reprobadas. Dentro de los límites de lo normal, las personas actuamos con imperfección, por más educados y correctos que seamos.
Es importante precisar que cada vez que el hombre cometa actos denigrantes, experimentará culpa y cierto remordimiento, pues su conciencia le recordará la violación moral o espiritual hecha. En algunos casos patológicos, como ocurre con los psicópatas, parece la consciencia no operar en este sentido, siendo la persona de una insensibilidad y frialdad increíbles.
La culpa sin resolver puede tomar diversas avenidas, como explica el Dr. Narramore (1996):
_ Comportamiento ejemplar: para ocultar su malestar y problemática interna (culpa), el individuo se porta muy bien, correctamente.
_ Dolencias corporales o somáticas: aunque son de carácter emocional, desembocan en reacciones fisiológicas como fatiga y dolores de cabeza.
_ Sentimientos depresivos: la persona puede acusarse continuamente; uno de los componentes en la sensación de depresión.
_ Hundimiento: la persona puede adentrarse más en malos actos, como un sentimiento de derrota, lo cual agranda más su sensación de culpabilidad.
_ Condena: ligado a los sentimientos depresivos, la persona se culpa o condena por haber cometido algún acto malo, perverso o vergonzoso.
_ Castigo: es posible que la persona se castigue a sí misma, negándose el alimento u otro recurso. En algunas culturas o eventos de tipo religioso o ritualístico se infligen daño físico como medio de expiación.
_ Expectación de censura: la persona piensa que quienes le rodean la harán objeto de censura y condenación. Se puede pensar que el mundo la tiene por indigna.
_ Proyección y crítica: es posible que las personas critiquen y juzguen a otros, por conductas que ellas mismas no han superado.
_ Compensación: la persona se dedica a hacer buenas obras y acciones para aminorar su sensación de culpa y sentirse expiada, acaso de paz.
Cabe reflexionar que ambos tipos de culpa (con respecto al Dios y la autocensura personal) hacen vivir muy mal a la persona. Las anteriores avenidas de la culpa, deben ser suficientes como para tratar de disfrutar la paz interior y solucionar aquellas conductas erróneas de uno mismo.
Cada acto, “malo” traerá sus consecuencias y malestar interior. Es algo propio de la naturaleza psicológica de Ser Humano. De manera que las buenas actuaciones cimentadas en valores y principios nobles, alivian y previene a las personas de caer en comportamientos inmorales, que a la postre sumirían a la persona en la frustración, la inconsciencia, la culpa, el sinsentido de la vida.
LAS PERSONAS SIENTEN CULPA PORQUE...
_ Realizan acciones que van contra el orden natural del bien y lo bueno.
_ Fueron muy censuradas, castigadas, exigidas, criticadas y condenadas, en alguna etapa de la vida (especialmente en la infancia) por cuanto hacían, si bien en muchos casos no se justificaba la censura.
_ Posponen o evaden el cambio personal, por estar esclavizadas a comportamientos dañinos.
_ La inseguridad personal forma parte de su carácter y temen, dudan, vacilan, frente a sus actuaciones personales.
_ Permite que otros les manipulen y decidan por ellos. Luego se auto censura por no ejercer una voluntad firme y propia.
IDENTIFICA, EVITA Y CONFRONTA LA CULPA
Las siguientes sugerencias pueden ayudarte con respecto a este tóxico emocional.
_ Nunca olvides tu imperfección humana; actuamos muy acertadamente en muchas oportunidades; en otras, no tanto. No podemos culparnos por ser imperfectos.
_ Para la persona que crea en Dios el perdón divino libera el alma y el espíritu de la carga de culpa llevada por meses y años por haber transgredido normas divinas.
_ Perdona a aquellas personas que contribuyeron en algún período de tu vida en un sentimiento interiorizado de culpa.
_ Apuesta siempre por el bien y lo bueno, esto ahorra muchos remordimientos en la vida.
_ Cultiva una buena autoestima, que te fortalezca ante la crítica negativa, la intolerancia, el juicio de otros.
_ Ten metas reales, no ideales, desmentidos e irreales que te harán sentir incapaz, frustrado y lleno de culpa.
ALGUNA PREGUNTA PARA REFLEXIONAR
1.- ¿Cuándo fue la última vez que te sentiste culpable? ¿Por qué?
2.- ¿Qué tanto te exiges a ti mismo/a? ¿Qué sucede cuando no logras tus propósitos?
3.- Recuerda alguna experiencia con determinada persona que te hizo sentir culpable. ¿Cómo manejaste dicha situación?.