Como en todas las épocas del año, Semana Santa tiene sus tradiciones y costumbres, y en cada país son distintas. Aquí la semana santa es un visto y no visto en cuanto al aspecto laboral. El viernes santo es festivo, pero nada más. Son tres días, no existe el concepto de irse de vacaciones en Semana santa, porque es un fin de semana de 3 días como otro puente. Por supuesto las tradiciones religiosas si se siguen, pero recreativamente es un fin de semana de tres días.
Aquí en Semana Santa tienen tradiciones distintas de las que se tienen en España. En Chile, ni palma ni mona; pero ya sabéis que a mi eso de acumular tradiciones me encanta, así que unimos la costumbres y nos quedamos con las siguientes:
La Palma
En España yo toda la vida he ido a bendecir la palma el Domingo de Ramos, primero en familia cuando era pequeña y después con mi ahijada. Parte de mi papel de madrina era regalarle una palma, y me encantaba regalársela con montones de dulces colgando. A mi me encantaba tener una palma gigante con la que ni podía del peso, y me encantaba el olor, los detalles de trenzado y, claro que sí, las chuches que colgaban por todos lados. Podríamos decir que en España uno tiene una idea de palma como las siguientes, ya sean minis o gigantes:
En Chile las palmas no son nada parecido. Son hoja de palma, algunas trenzadas otras no. Se venden en la puerta de la iglesia donde se van a bendecir. Aquí podéis ver las dos palmas juntas:
Nuestras mini palmas en el ramo de Laurel y hoja de palma trenzada típica de Chile.
¿No tienen mucho parecido verdad? Aunque la esencia es la misma.
La Mona de Pascua
Así como el Domingo de Ramos da inicio a la semana santa, el lunes de Pascua la cierra. En mi casa, el lunes de pascua siempre comíamos la mona, que regalan los padrinos. Sé que la mona tradicional es forma de pastel o de tortel como el de reyes, como este:
pero para mi toda la vida ha simbolizado huevos y figuras de chocolate. Aunque sé que no en toda España se celebra, y no en todas las comunidades se come el mismo tipo de dulce. Pero si me hablan de monas de pascua a mi mente vienen imágenes de castillos de chocolate con las figuras del momento, monas del Barça. Cada año me he maravillado con las monas de pascua que hace la Pastisseria L’Escribà. Os enseño algunas que enseñaron en el Diari Ara:
A mi me daba mucha pena romperlas, y en casa había mona por semanas, pero son tan ricas todas! Aquí no es festivo el lunes de pascua y no saben que es la mona ni han oído hablar de ella. Pero, el Domingo de pascua, los niños amanecen preguntándose si el conejo de pascua les habrá dejado huevitos de chocolate.
El conejo y los huevitos de pascua
Esta tradición de los huevos de pascua, según me cuenta Wikipedia, tiene su origen en el norte de Europa. Aquí la tradición de buscar huevitos de chocolate se sigue en las casa e incluso en algunas guarderías o colegios, como una actividad para hacer de manera grupal con la clase. Los pasillos de los supermercados, en concreto este año, están desde antes que empezaran los colegios llenos de Huevos y conejos de chocolate. Y a los niños les encanta jugar a la búsqueda del tesoro para obtener recompensas de chocolate:
¿Cómo hacemos nosotros? Pues combinamos. Bendecimos nuestra palma el domingo de ramos. Compramos una de aquí pero también un buen amigo nos manda unas mini palmas hechas allí, que hacen las delicias de las enanas. Y el domingo de pascua cuando se despiertan buscamos huevitos que ha dejado el conejo. El último suele ser uno gigante, que utilizamos de mona de pascua. Aunque en alguna ocasión he intentado cocinar alguna mona más tradicional, ya os la enseñaba aquí. Pero no es lo mío :) Como las niñas tienen las madrinas lejos y una tiene al padrino muy lejos, y la otra tiene padrino chileno y no lo celebra, las compramos nosotros pero de parte de los padrinos.
y vosotros ¿cómo celebráis la semana santa? ¿Alguna tradición familiar?
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