Aunque a mucha gente le cuesta trabajo entenderlo, siempre se dice que eso de traducir cosas de un idioma a otro no se puede hacer de forma totalmente literal, ya que hay expresiones, giros y significados que en un idioma pueden tener todo el sentido del mundo pero al traducirlos a otro pierden todo su significado. Supongo que por este motivo se oye a veces la frase aquella que dice eso de "traductores, traidores".
Pues bien, este debe de ser el caso de quienes han traducido la carta de un restaurante localizado en la calle Cádiz, de Madrid. Uno de sus platos son las conservas (que en este caso se trata de delicias del mar) y ellos, ni cortos ni perezosos, han llegado a la conclusión de que "conservas" es la segunda persona del singular del presente de indicativo del verbo "conservar", y como tal lo han traducido: conservas = you preserve. Y se han quedado tan a gusto, oiga. Mientras tanto, a saber la cantidad de traductores de verdad que estarán en paro...