Trajes de novio blancos

El blanco es el color nupcial por antonomasia, está en los adornos florales, en la tarta y por supuesto, en el vestido de la novia. Pero ¿Por qué no puede el novio vestir de traje blanco también? Todo el mundo dice que no se le puede quitar protagonismo a la novia, y que por ello es la única que puede ir de blanco. Pero el novio también es el centro de la ceremonia y debe destacar por encima de todos los asistentes. Por lo tanto el blanco es una opción igual de válida para él.
Hoy en día que han cambiado miles de tradiciones respecto a las bodas, el color del traje de novio no podía quedarse atrás. En una época como la nuestra que lo que prima en las bodas es el gusto de los consortes y la moda, cada uno puede elegir lo que le apetezca para disfrutar de su gran día, como por ejemplo, llevar un traje de novio blanco.
Además ya no solo por apetencia, el rito de la ceremonia puede exigir un traje blanco, como por ejemplo:
-Es una boda en la playa.
-Es el color que exige el rito.
-Es su segunda boda.
En Ottavio Nuccio Gala te presentamos nuestra colección de trajes blancos para novio, ya sea en levita en traje o en esmoquin.
Es cierto que en una boda los novios deciden y pueden hacer lo que quieran, hay que hacerlo con un mínimo de gusto y sofisticación. Todo va sujeto al lugar y estilo de ceremonia.
Por ejemplo para una boda de playa, ibicenca o simplemente en un jardín, dándole un estilo isleño se puede optar por un traje blanco de lino. La ligereza del tejido y su apariencia informal pero apropiada para esas ocasiones de exterior, da el toque perfecto a ese tipo de boda más desenfada que muchos novios buscan.
 
Si por el contrario la boda es en interior, con temática romántica y clásica, la opción de traje barroco blanco sería adecuado, ya sea en frac o en redingote. Este estilo se funde perfectamente con los trajes de novia tan ostentosos en su esencia. Es la vestimenta clásica de novio que remarca el estilo vintage de algunas bodas. Todos los detalles de los que están compuestos, ya sea en pedrería o bordados, forman una perfecta armonía con los detalles de la boda y por supuesto del vestido de la novia.
 
Otra opción perfectamente válida, sobre todo para bodas veraniegas sería la de un esmoquin blanco. Esta prenda que ha caído en desuso es muy elegante, no obstante, no debemos olvidar que el esmoquin es una prenda de noche, por lo tanto habrá que utilizarla a partir de las 19:00 de la tarde.
 
En definitiva el blanco es un color perfecto para los novios que quieren marcar la diferencia entre ellos y el resto, guardando ciertas claves nupciales.
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