La película es una mierda como el sombrero de un picaor. Trance no se merece llevar la imprenta de Danny Boyle. No la considero digna de un menda que hizo Trainspotting, 28 días después o Slumdog millionaire. En toda filmografía que se precie siempre hay manchas y Trance es de esas que cuesta quitar.
Londres, mafia, el robo de un cuadro, niña guapa, nadie es lo que parece y todos están en contra de todos. Estos son los ingredientes a cocinar. En principio ya nos hemos comido más una historia así, con lo que resultaba complicado que fuera un pelotazo. Acaba siendo lineal, terminando por mantenerse en pie gracias a una magnífica banda sonora.
No sé si necesita más acción, menos amores o algún tipo de enganche que Mr. Boyle no ha sabido darnos. En ningún momento del metraje terminas por tener feeling, aunque durante toda la película se lo estés pidiendo al realizador. Quiero querer pero no he podido, os juro que he intentado por todos los medios que me gustase pero ha sido imposible, y mira que lo siento.
La banda sonora es brutal. Otra cosa le podremos criticar a Danny Boyle pero sus bandas sonoras son muy buenas. Acordaros de Trainspotting. Vuelve a trabajar con Rick Smith (media naranja de Underworld) y da rienda suelta a sus más puro y enigmático techno del que hace gala en Underwold. Es de esas bandas sonoras que automáticamente te vas a google a descargarla nada más acabar de ver la peli. Como buen samaritano que soy os ahorro ese tiempo para que lo gastéis es cosas más útiles como drogarse o tirarle piedras a los gatos.