Transformación del adulto en Montessori – Preparation of the adult

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La transformación del adulto es el tema que vamos a tratar este mes en RetoMontessori. Por si no sabéis en qué consiste RetoMontessori os cuento: Cada mes (normalmente el último martes del mes), publico un post sobre un tema de filosofía Montessori o relacionado con la pedagogía Montessori, que será el tema que trabajaremos durante el mes siguiente en RetoMontessori. Este post estará en el blog a disposición de todo el mundo.

Tres días después del post, es decir, el viernes de esa misma semana, expongo el tema con más detalle en un webinar y los asistentes pueden participar planteando preguntas, compartiendo sus ideas, debatiendo, etc, algo resulta muy interesante y enriquecedor! Para asistir a estos webinars mensuales es necesario unirse a RetoMontessori, aquí os explico cómo hacerlo.

No quiero enrollarme más sobre el funcionamiento de RetoMontessori para no extenderme mucho, pero si tenéis cualquier duda ya sabéis que podéis dejarme un comentario al final de este post o contactarme por email.

Después de esta intro, vamos al tema:

Montessori es probablemente la pedagogía en la que más importancia se da a la preparación interna del adulto. No basta con adquirir unos conocimientos para ser guía Montessori, es necesario realizar una transformación a diferentes niveles: Espiritual-emocional, Intelectual, Técnico y Físico.

El adulto forma parte del entorno del niño; debe adaptarse a las necesidades del niño para no ser un obstáculo y para no sustituir al niño en las actividades esenciales para su crecimiento y desarrollo. (Dra. Maria Montessori, El Secreto de la Infancia)

En el caso de los padres, no es necesario que nos convirtamos en guías para integrar Montessori en nuestro estilo de crianza, pero sí que debemos llevar a cabo una transformación; yo diría que de los cuatro aspectos de la transformación hay dos especialmente importantes para los padres: el Espiritual-emocional y el Físico. Vamos a verlos con más detalle.

Espiritual y emocional

• Es la primera transformación necesaria, antes de entrar en las siguientes.
• Dejar que el niño sea dueño de su aprendizaje.
• El adulto debe cambiar su actitud hacia el niño, hacia la vida en general y hacia sí mismo. Debe tener:
  • Fe: En el desarrollo del niño y en su bondad. (Un niño que muestra un mal comportamiento no es malo, simplemente se ha encontrado con obstáculos en su desarrollo y ese comportamiento es una llamada de auxilio.)
  • Paciencia: Entender y aceptar el ritmo de cada niño.
  • Perseverancia: No darse por vencido cuando las cosas no salen bien.
  • Humildad: Ser capaz de admitir sus propios errores
• El adulto debe entender qué es la ira, saber gestionar la suya propia y ayudar al niño a reconocerla y gestionarla. (La ira generalmente aparece cuando nuestras necesidades no están cubiertas, si no somos capaces de reconocer esas necesidades y buscar la manera de satisfacerlas, buscamos un "culpable" sobre quien volcar nuestra ira)
• El adulto debe practicar la escucha activa:
  • Es el primer paso para que una persona se sienta valorada.
  • Si el niño no tiene un modelo de lo que es realmente escuchar, no será capaz de hacerlo, e incluso perderá la capacidad de escucharse a sí mismo, a su guía interior.

Físico

• Mantener un buen estado general de salud y energía.
• Tono de voz.
• Movimientos.
• Apariencia: No debe suponer una distracción (ropa extravagante, peinados o maquillaje llamativos, uñas pintadas...)

Intelectual

Para apoyar el desarrollo del niño debemos entender cómo funciona; además de aprender y aplicar los principios de la filosofía Montessori, el adulto debe aprender continuamente sobre desarrollo humano, neurociencia, y otras áreas relacionadas. El aprendizaje del adulto debe ser continuo.

Técnico

• El adulto debe saber cuándo intervenir y cuando no hacerlo. Debe ser capaz de mantener el equilibrio entre libertad y responsabilidad.
• Trabajar con los materiales para conocerlos bien, entender qué ofrecen al niño y manejarlos con precisión.
• El adulto debe sentirse tan cómodo con los materiales que en el momento de presentarlos toda su atención pueda estar centrada en la reacción del niño.
• También debe saber identificar el momento ideal para presentarlos a cada niño.

Como veis, los aspectos espiritual-emocional y físico son los que mejor podemos trabajar como padres y los que mayor impacto van a tener en nuestra relación con nuestros hijos. El aspecto intelectual y especialmente el técnico, están genial si queremos y podemos ir más allá, pero no son esenciales si no queremos convertirnos en guías Montessori.

¿Cómo lo veis? La verdad es que es algo que no se trabaja sólo en un mes, de hecho las guías tardan varios años de formación en realizar este transformación, pero os propongo empezar poco a poco, tenéis todo un mes para empezar con vuestra transformación, y por supuesto espero que me contéis vuestras experiencias en los comentarios!

A los miembros de RetoMontessori os espero el viernes en el webinar para hablar más a fondo de este tema, ver ejemplos prácticos y resolver las preguntas que tengáis. 🙂

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Montessori pedagogy is probably where more importance is given to the internal preparation of the adult. It's not enough to acquire knowledge to be a Montessori guide, a transformation is needed at different levels: spiritual-emotional, intellectual, technical and physical.

Now the adult himself is part of the child's environment; the adult must adjust himself to the child's needs if he is not to be a hindrance to him and if he is not to substitute himself for the child in the activities essential to growth and development. (Dr. Maria Montessori, The Secret of Childhood)

For parents, it is not necessary that we become guides in order to integrate Montessori in our parenting, but we must carry out a transformation; I would say that of the four aspects of transformation there are two especially important for parents: the spiritual-emotional and physical. Let's see them in more detail.

Spiritual and emotional preparation

• It is the first necessary transformation.
• Let the child own their learning.
• The adult must change their attitude towards the child, to life in general and himself. Must have:
  • Faith: In the development of children and their goodness. (A child showing bad behavior is not bad, it just has encountered obstacles in their development and that behavior is a distress call.)
  • Patience: To understand and accept the rhythm of each child.
  • Perseverance: Not give up when things go wrong.
  • Humility: Being able to admit their own mistakes
• The adult should understand what is anger, know how to manage their own and help the child to recognize and manage it. (Anger usually occurs when our needs are not met, if we are not able to recognize those needs and find ways to meet them, we seek a "guilty" about who turn our anger)
• The adult must be able to listen actively:
  • It is the first step for a person to feel valued.
  • If the child does not have a model of what listening really means, she will not be able to do it, and will even lose the ability to listen to herself, her inner guidance.

Physical preparation

• Good general state of health and energy
• Voice tone
• Movements
• Appearance: Must not be the focus or a distraction (extravagant clothing, hairstyles or flashy makeup, painted nails...)

Intellectual preparation

In order to support the development of the child we must understand how this development works. In addition to learning and applying the principles of the Montessori philosophy, the adult must continually learn about human development, neuroscience, and other related areas. Adult learning must be continuous.

Technical preparation

• The adult must know when to intervene and when not to. Must be able to maintain balance between freedom and responsibility.
• Working with materials to know them, understand what they offer the child and accurately handle them.
• The adult should feel so comfortable with the materials that at the time of the presentation their full attention can be focused on the child's reaction.
• The adult should also be able to identify the ideal time for presenting a material to a child.

As you can see, the spiritual-emotional and physical aspects are the ones which we can best work as parents and will have the greatest impact on our relationship with our children. The intellectual and especially the technical aspect are great and if we want to go further, but are not essential if you do not want to become a Montessori guide.

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