Transición al minimalismo (II)

Ayer fué el segundo día con las MT110, y antes de comentar las sensaciones os pongo en antecedentes: dos días antes hice 10km de monte con algunas cuestas y el día anterior 16,50km de campo a un ritmo alto. Por lo tanto ya llegaba con las piernas calentitas.
El objetivo para esta segunda sesión era hacer 5km por sendas y caminos con poco desnivel y dificultad técnica baja, es decir, ir subiendo el kilómetraje de manera paulatina y siempre con la máxima de prestar especial atención a las sensaciones que mi cuerpo me va dando.
Los primeros 2km pasaron con algunas molestias en el basto externo izquiero, algo que me suele acompañar siempre cuando llego un poco cargado, aunque poco a poco cuando caliento la pequeña molestia va desapareciendo, y con estas zapas me pasa algo muy parecido.
A partir de ahí, mucho más comodo y con sensaciones muy positivas, aunque todavía tengo que ir bastante concentrado en mantener la zancada corta, sobre todo en llano y bajadas, donde tiendo a alargar y a talonar mucho. Es increible como se nota con estas zapatillas cuando talonas de más, con las amortiguadas la sensación es radicalmente distinta.
Finalmente 5,15km ... de verdad, me esta encantando la sensación que me aporta este calzado y por ahora no tengo ni agujetas ni nada particularmente diferente a las molestias que tengo con las amortiguadas, solamente al final ya notaba la parte externa del pie izquierdo algo más castigada, como una sensación de roce, que ya ha desaparecido
Hoy, un día después, me espera una tirada larga con las amortiguadas, aunque estoy deseando volver a ponerme mis MT110 y seguir la transición.