Quitando las vivencias en primera persona…, el video es el contenido más potente. Se que soy un poco pesado con el tema de los Timelapse, pero tienen una potencial tal…, solo tienes que ponerte en una habitación, apagar las luces y ponerte unos cascos…, y el teletransportarte a realidades en movimiento está asegurado.
Si hay una tipología de video promocional que realmente me llega, es el Time-lapse. Creo que tiene todo lo que un contenido debe de tener para enganchar. Es la estética y el no intentar vender nada. Cuando se concibe una obra de arte de esta manera, se desarrolla en un ámbito totalmente desinteresado, y no es otra cosa que la fuerza de la propia imagen la que nos mueve y nos conmueve a la vez.
Para muestra un botón, ¿no?. Pues aquí os enseño el último video que me ha enganchado durante algo más de 4 minutos, y tengo que decir que realmente me ha llegado:
Porque los Time-Lapse me transmiten…
- Estética: Por los lugares bonitos y por las ganas de seguir conociendo mundo.
- Sensaciones: Imágenes sutiles y delicadas de detalles que marcan la diferencia en momentos concretos.
- Naturaleza: Todo empieza y termina en la naturaleza.
- Ternura: Esa parte humana que todos los lugares tienen, y que lo transmiten todos y cada uno de los habitantes del lugar.
- Movimiento: La vida cual sucesión de momentos.
- Paz interior: Nos acerca a la sintonía con nuestro entorno.
Son tanto los sentimientos y las emociones que puede suscitar un video…, y que conste que todavía no me he aventurado al mundillo del Time-lapse. Más bien me dedico a valorar y admirar las maravillas que otros hacen.
Siento si este no ha sido un artículo de contenido práctico, más bien un grito por el trabajo bien realizado y por la magia de la vida.