En una demostración de unidad y protesta, cerca de 350 transportistas de San Luis Potosí se han sumado al paro nacional este jueves, exigiendo acciones concretas para garantizar la seguridad en las carreteras federales, escenario de frecuentes asaltos a vehículos de carga. El bloqueo, que se extiende desde San Luis de la Paz hasta más allá de San José de Iturbide, ha impactado significativamente la circulación en la carretera 57, una de las principales rutas hacia Querétaro.
Raúl Torres Mendoza, consejero nacional de la Alianza Mexicana de Organización de Transportistas A.C. (AMOTAC), expresó el hartazgo del gremio frente al constante peligro que representa el robo de mercancías, señalando que, solo en San Luis Potosí, se han reportado 75 incidentes de este tipo en lo que va del año. Según Torres Mendoza, las zonas de mayor riesgo incluyen el corredor desde Matehuala hasta Santa María del Río, pasando por puntos críticos como el Huizache y el entronque a Guadalcázar, con dirección hacia el estado de Guanajuato.
Los transportistas, a través de este paro, demandan una serie de medidas para mejorar su seguridad y condiciones de trabajo. Entre ellas, piden una vigilancia más eficaz por parte de la Guardia Nacional en las rutas afectadas, la regulación de los vehículos de doble remolque que aumentan el riesgo en las carreteras, la eliminación de las cuotas excesivas en autopistas, la abolición de los permisos municipales para cargar y descargar mercancía, y el fin a las extorsiones y abusos por parte de elementos policiacos.
Este movimiento de protesta no solo busca llamar la atención sobre la inseguridad que enfrentan los transportistas en sus rutas diarias, sino también sobre la necesidad de una reforma integral que atienda sus múltiples demandas y contribuya a un ambiente de trabajo más seguro y justo para el sector.
Imágenes de Altiplano Press
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