¡Que no llego!
Estaba sentada al escritorio de mi habitación en el Jungendherberge de Liechtenstein el sábado 20 de octubre de 2018 por la noche intentando dar forma al itinerario del día siguiente cuando, por una de esas felices conjunciones astrales, me dio por comprobar los horarios de apertura de la Casa de Nietzsche en Sils-Maria. ¡¡Horror!! El día siguiente era el último que estaba abierta antes del descanso anual previo a la temporada invernal, y solo abría de 3 a 6 de la tarde.
Ni corta ni perezosa, cambié todo mi plan: costara lo que costara, dejaría Vaduz a primera hora del domingo 21 de octubre para llegar al lugar en el que Nietzsche pasó seis veranos de su vida, el lugar en el que escribió gran parte de su obra y en donde concibió otra tanta; un sitio en el mundo en el que se sintió tranquilo, y no me lo quería perder por un detalle de fechas.
Sils im Engadin (Segl, en romanche) se encuentra en la Alta Engadina, en la orilla izquierda del Eno, entre los lagos Sils y Silvaplana, en el cantón de los Grisones de Suiza. La estación de tren más cercana es la de Sankt Moritz (St Moritz), población de la que solo la separan 10 km y a la que debe llegarse para, desde allí, tomar el autobús hacia el pequeño pueblo alpino.
A continuación, unas imágenes del recorrido en bus por Sils, cerca ya de mi destino.
«La valía de un hombre se mide por la cuantía de soledad que aguanta» Friedrich Nietzsche
La vida de Nietzsche, a grandes rasgos
1844 El 15 de octubre nace Friedrich Wilhelm Nietzsche, hijo del pastor protestante Karl Ludwig Nietzsche y su esposa Franziska Oehler, en Röcken, cerca de Lützen (provincia prusiana de Sajonia)
1846 Nace su hermana Elisabeth
1849 Fallece el padre de Nietzsche de una enfermedad cerebral, a los 35 años
1850 La familia se traslada a Naumburgo
1858-64 Formación en la prestigiosa escuela Schulpforta (Schulpforta Gymnasium), cerca de Naumburgo
1864 Inicia sus estudios de teología y filología clásica en la Universidad de Bonn
1865 Nietzsche sigue al profesor Friedrich Wilhelm Ritschl a la Universidad de Leipzig, donde continúa sus estudios filológicos | Primer contacto con la filosofía de Schopenhauer, que se convierte en una fuerte influencia para él
1866 Inicia su amistad con el estudiante Erwin Rohde, que se convertiría en amigo íntimo
1868 Conoce a Richard Wagner, un personaje fundamental en el desarrollo del filósofo
1869 Gracias a Ritschl, recibe una oferta extraordinaria de la Universidad de Basilea (Suiza) para ejercer como profesor de filología clásica antes de licenciarse, siendo así el profesor más joven de la universidad | Traba amistad con el historiador de arte Jakob Burckhardt y el teólogo Franz Overbeck | La Universidad de Leipzig le concede el doctorado sin examen ni disertación en mérito a la calidad de sus investigaciones
1870 La Universidad de Basilea le asciende a profesor honorario | Obtiene un permiso para servir en el bando prusiano durante la guerra franco-prusiana como sanitario, ya que la neutral Suiza le impide alistarse como combatiente | Tras un mes en la milicia, cae gravemente enfermo de difteria y disentería, enfermedades que le arruinan la salud de por vida
1872 Publica su primer libro, El nacimiento de la tragedia en el espíritu de la música, que no fue bien recibido entre sus colegas filólogos, incluido el profesor Ritschl | Nietzsche visita a Wagner y a su mujer Cósima (hija de Franz Liszt) con motivo de la inauguración del Festival de Bayreuth
1873 Publica la Primera consideración intempestiva: David Strauss, el confesor y el escritor | A partir de este año, Nietzsche sufre de ataques de migraña recurrentes que, progresivamente, van minando su ya delicada salud
1874 Traba amistad con el músico Peter Gast (Heinrich Köselitz) | Publica la Segunda consideración intempestiva: sobre la utilidad y el perjuicio de la historia para la vida y la Tercera consideración intempestiva: Schopenhauer como educador
1876 Cuarta consideración intempestiva: Richard Wagner en Bayreuth | Nietzsche conoce al psicólogo Paul Rée | A causa de sus persistentes ataques de migraña, Nietzsche solicita un año de excedencia de la Universidad de Basilea y pasa el invierno con Paul Rée en Sorrento | Allí se reúne con Richard Wagner por última vez
1878 Publicación de la primera parte de Humano, demasiado humano: un libro para espíritus libres | Ruptura definitiva con Wagner
1879 El sufrimiento de Nietzsche se hace tan insoportable que le obliga a renunciar a su puesto en la Universidad de Basilea | Recibe una pensión vitalicia, aunque diversos amigos le ayudarán económicamente durante toda su vida
1880 Publicación de El caminante y su sombra y de la segunda parte de Humano, demasiado humano: un libro para espíritus libres
1881 Primer verano en Sils-Maria | Escribe Aurora: reflexiones sobre los prejuicios morales
1882 Publicación de La ciencia jovial: la gaya ciencia | Paul Rée le presenta a la estudiante rusa Lou Andreas-Salomé (en la casa que la escritora alemana Malwida von Meysenbug tiene en Roma) | Se establece un triángulo de amistad y trabajo entre Nietzsche, Rée y Lou | Cuando el primero manifiesta a su madre y hermana su deseo de casarse con Salomé, estas no lo aprueban y acaban discutiendo | Nietzsche es rechazado por Lou y sufre una gran decepción | Los tres amigos acaban rompiendo su relación
1883-88 Nietzsche pasa los inviernos en Italia (Génova, Rapallo, Turín) y Francia (Niza) y los meses de verano en Sils-Maria, donde se siente mejor de sus dolencias | A pesar de su precaria salud, escribe las principales partes de sus obras cumbre en rápida sucesión: Así habló Zaratustra (1ª y 2ª partes [1883], 3ª parte [1884], 4ª parte [1885]), Más allá del bien y del mal: preludio a una filosofía del futuro (1886), La genealogía de la moral: un escrito polémico (1887); finaliza Ditirambos de Dioniso (1888), El caso Wagner: un problema para los amantes de la música (1888), El ocaso de los ídolos, o cómo se filosofa a martillazos (editado a principios de 1889), El anticristo: maldición sobre el cristianismo (1888) y Ecce homo: cómo se llega a ser lo que se es (publicado en 1908) | Nietzsche recibe su primer reconocimiento público en 1888, cuando Georg Brandes imparte una clase magistral sobre su obra en la Universidad de Copenhague
1889 El 3 de enero, sufre un colapso mental en Turín¹ del que jamás se recuperará | Su madre se lo lleva con ella a Naumburgo (vía Basilea y Jena) y le cuida hasta su propio fallecimiento
1897 Muere Franziska | La hermana se traslada a vivir con él y se van a Weimar
1900 Friedrich Nietzsche muere el 25 de agosto, a la edad de 55 años, tras contraer neumonía | Es enterrado en la tumba familiar en Röcken.
Cuando el pobre Nietzsche vino por primera vez a Sils-Maria, en el verano de 1881, era poco menos que una ruina humana. Perdía la vista a pasos agigantados, le atormentaban las migrañas y las enfermedades le habían obligado a renunciar a su cátedra en la Universidad de Basilea, después de 10 años de dedicación. Esta era entonces una remota región alpina donde apenas llegaban forasteros. Fue un amor a primera vista: le deslumbraron el aire cristalino, el misterio y vigor de las montañas, las cascadas rumorosas, la serenidad de lagos y lagunas, las ardillas y hasta los enormes gatos monteses.
Hoy día sigue siendo fácil entender porqué el filósofo se sintió tan atraído por este lugar; a pesar del progreso, este sigue siendo un rincón del mundo rodeado de naturaleza, cursos de agua y cielos inmensos.
«Bueno, mi querido amigo, vuelvo a estar en la Alta Engadina. Es mi tercera visita a este lugar y, una vez más, siento que mi verdadero refugio y mi hogar están aquí y en ninguna otra parte» (carta de Friedrich Nietzsche a un amigo, junio de 1883)
Empezó a sentirse mejor, escribió cartas exultantes de entusiasmo por el lugar —incluso un poema— y, desde entonces, volvería por seis veranos consecutivos a Sils-Maria, en temporadas de tres a cuatro meses.
Sils-Maria
Aquí estaba yo sentado, aguardando, aguardando —a nada,
Más allá del bien y del mal, disfrutando
Ya de la luz, ya de la sombra, siendo totalmente solo juego,
Totalmente mar, totalmente mediodía, totalmente tiempo sin meta.
Entonces, de repente, ¡amiga!, el que era uno se convirtió en dos —
Y Zaratustra pasó a mi lado
(Así habló Zaratustra: un libro para todos y para nadie, Friedrich Nietzsche;
Introducción, traducción y notas de Andrés Sánchez Pascual
Alianza editorial, El libro de bolsillo, Biblioteca de autor, 2003 (6ª ed.)
Parada del bus St Moritz – Sils-Maria | La casa de Nietzsche queda a pocos metros de aquíEl autobús al que me subí en St Moritz me dejó en la plaza principal de Sils-Maria y, desde allí, sin ni siquiera preguntar, solo tuve que andar 5 minutos hasta llegar al Hotel Edelweiss. Justo al lado, se medio escondía una casita como recién salida de un cuento infantil, humilde y alegre, blanca y azul, llena de flores en las ventanas. Un sendero como los que dibujaba de pequeña llevaba hasta la puerta de entrada, precedida por unas cuantas escaleras y una baranda. Todo muy bonito.
La casa data de principios del siglo XIX y se halla situada en la ladera que conduce hacia las montañas de Marmoré. En tiempos de Nietzsche pertenecía a la familia Durisch (Gian Durisch, el cabeza de familia, fue alcalde de Sils durante muchos años). En la misma casa, la familia regentaba una tienda de ultramarinos y a Nietzsche, aquí, le gustaba comprar cosas, aunque normalmente hacía sus comidas principales en los hoteles Alpenrose o Edelweiss. «En la casa donde vivo puedo comprar galletas inglesas, carne en conserva, te, jabón y, de hecho, cualquier cosa que puedas imaginar: es muy práctico», escribió a un amigo el 15 de junio de 1883.
La escultura “Nietzsche in his Dynamic Force”, de Giuliano Pedretti, se encuentra delante de la casa, a la derecha | El indicador de la fachada señala la senda hacia Marmoré, justo al lado de la casa Vista lateral desde la Casa de Nietzsche | El trozo de baranda que se aprecia a la izquierda de la foto, asciende a Marmoré Placa sobre la puerta de entrada de la casa en la que veraneó el filósofo: “En esta casa Friedrich Nietzsche vivió durante los productivos meses de verano de 1881-1888” Al lado de la parte de la casa que da al Hotel Edelweiss, se han colocado dos esculturas de animales, una serpiente y un águila, concretamente. Ambas hacen referencia al libro Así habló Zaratustra, en el que se explica que su protagonista dejó su casa a los treinta años para vivir en una cueva en las montañas durante diez con la única compañía de su serpiente y su águila; aunque, puesto que se nos explica que la primera es su propia inteligencia y la segunda su orgullo, los animales no son otra cosa que personificaciones de aspectos de su propia personalidad | Está claro el paralelismo entre el retiro en la montaña de Zaratustra y la Sils-Maria de Nietzsche; de hecho, él mismo se refería a menudo a su habitación en la casa de los Durisch como su “cueva” Vista lateral de la Casa de Nietzsche (a la derecha de la entrada) Vista desde la ventana de la habitación de Nietzsche El precioso entorno de la Casa de NietzscheNietzsche en Sils-Maria
Su estricta rutina diaria incluía de 5 a 7 horas de ejercicio en forma de largos paseos por la zona, durante los cuales llenaba de notas las libretas que siempre le acompañaban. En su primer verano (1881) ya apuntó una idea clave que cambió la dirección de su filosofía: la idea del eterno retorno, el concepto básico de Así habló Zaratustra.
En uno de los recorridos que Nietzsche realizaba por la zona, se encuentra la que ha venido a denominarse “piedra de Nietzsche”. Según se dice, al pasar por aquí, le sobrevino la idea del eterno retorno: “‘Me detuve al lado de una gran piedra en forma de pirámide no muy lejos de Surlej. Fue entonces cuando ese pensamiento vino a mí.’ Friedrich Nietzsche sobre el pensamiento del eterno retorno, el concepto básico de Zaratustra, agosto de 1881″ (en la placa)El segundo verano (1883), Nietzsche vino cargado con más de 100 kilos de libros que leía a la vez que completaba la segunda parte y empezaba la tercera de Zaratustra. El trabajo en su «cueva» (así se refería a su habitación) y sus largos paseos le iban convirtiendo cada vez más en «el ermitaño de Sils-Maria», como le llegaron a bautizar sus convecinos.
En 1884 empezó a comer en el Hotel Alpenrose, lo que le brindó algunos contactos entre un grupo de señoras refinadas, que continuó cultivando los veranos siguientes y al que le agradaba asistir «como antídoto y, a veces, cura para escapar de mí mismo durante unas horas». Sin embargo, aparte de estos pequeños «escarceos sociales», el contacto que Nietzsche tuvo con los «excelentes habitantes de Sils» se limitó a su casero, al pastor y al maestro del pueblo.
El 20 de septiembre de 1888, Nietzsche dejó Sils-Maria sin saber que ya no habría de volver jamás.
Exterior del actual restaurante del Hotel Alpenrose Hotel AlpenroseEl museo
La Casa de Nietzsche está estructurada a modo de museo, de manera que la colección de obras, escritos y objetos se exponen en dos plantas: la planta baja, con tres salas de exposición, y el primer piso, que constituye el epicentro de este memorial con el estudio/habitación del filósofo.
Vestíbulo del museo La puerta de la derecha del vestíbulo conduce a una sala en la que puedes conocer al conservador de la Casa de Nietzsche, el doctor Peter Villwock | También es donde se adquieren las entradas y donde están a la venta obras y estudios de y sobre el filósofo y contemporáneos La exposición empieza en esta sala, a la izquierda del vestíbulo: busto de Nietzsche, fotografías suyas y de familiares, cartas, etc.• Planta baja
El pasillo de la planta baja exhibe también documentación y fotografías relativas a la vida y obra de Nietzsche. El visitante es introducido a las diferentes etapas de su biografía y a las figuras más importantes de su círculo social, a la influencia que ejerció sobre sus contemporáneos y las generaciones siguientes, y a su conexión con la Engadina y Sils-Maria, en particular.
También hay todas las obras del filósofo publicadas en vida en sus ediciones originales, algunas de ellas muy raras actualmente y con dedicatorias de su puño y letra, así como la traducción completa de las obras del filósofo editada por el Dr. Oscar Levy, especialista en Nietzsche.
La habitación llamada de Oscar Levy, traductor y editor de NietzscheEn la casa se guardan también dos máscaras mortuorias del alemán: la genuina, regalada por la familia Oehler al museo en ocasión de su inauguración, y una segunda encargada por Elisabeth Förster-Nietzsche, la hermana, por considerar que la original no era lo suficientemente «impresionante».
Las dos máscaras mortuorias que se conservanTras el colapso mental que Nietzsche sufrió en Turín, la hermana administró sus papeles con mucha energía y, desgraciadamente, sin respetar el material original. De hecho, hizo todo lo que estaba en sus manos para difundir el nombre y la fama del pensador sin importarle los medios utilizados. Así, agrupó todos los manuscritos, libretas de notas, etc. y se dispuso a preparar una edición completa de las obras de su hermano pasando por alto los principios editoriales y filológicos estrictos, y alterando a su capricho los pasajes que no le gustaban o que no aprobaba. En medio de esta locura, llegó a tomar pasajes elegidos al azar de las libretas de notas de Nietzsche y ordenarlos según su propio criterio, lo que resultó en la fabricación de una «nueva» obra del filósofo: La voluntad de poder.
Además de todo esto, Elisabeth fundó el Archivo Nietzsche en Weimar y recibió a invitados de todo el mundo para, de este modo, difundir sus propios conceptos del «superhombre» del hermano. Fue la responsable del mito de Nietzsche como precursor espiritual del Tercer Reich.
Las vitrinas del pasillo contienen documentos que ilustran estas maquinaciones. Están situadas al otro lado de la cocina, donde Giorgio Colli y Mazzino Montinari tomaron la decisión de publicar una nueva edición crítica de las obras de Nietzsche (Mazzino Montinari fue un profesor italiano, especializado en germanística, cuya edición contemporánea de las obras del filósofo, realizada junto a Giorgio Colli, supuso el «renacimiento de Nietzsche»).
• El estudio de Basilea
Gracias a una serie de felices coincidencias, el contenido del estudio de Nietzsche en Basilea se adquirió en 1991. El mobiliario que hoy podemos ver en el museo, acompañó al pensador desde su residencia de Naumburgo a su primer apartamento en Basilea, luego al segundo y, finalmente, al apartamento de soltero en el que vivió hasta mayo de 1879. Cuando dejó Basilea, Marie Baumgartner-Koechlin, amiga íntima de Nietzsche (y quien tradujo al francés su ensayo Richard Wagner en Bayreuth), compró los muebles y, con el tiempo, llegaron hasta aquí.
La mesa y las sillas del estudio de Nietzsche en BasileaEn contraste con la modesta simplicidad de la habitación de Nietzsche en Sils-Maria, el estudio de profesor de Basilea refleja su firme intento de llevar una existencia burguesa respetable. La función de esta «habitación de Basilea» («Basel’s Room») en la Casa de Nietzsche es documentar las actividades del filósofo como profesor de Filología Clásica así como dar a conocer el valor de sus estudios, su círculo de amistades y sus vastos conocimientos de la literatura internacional.
• Primer piso: la habitación de Nietzsche
La habitación que ocupaba Nietzsche en la casa de los Durisch | Sobre la cama, una escultura de un bigote gigante como alusión a la presencia del filósofo La cueva de NietzscheNietzsche se sentía como en casa en su espartana habitación con el mobiliario reducido a las necesidades básicas: una cama, mesa y silla, diván, lavamanos, espejo, y lámpara.
Para sentirse lo más cómodo y tranquilo posible, Nietzsche empapeló personalmente las paredes con un papel pintado en sombras de marrón, azul y verde (que se encontró debajo del último panelado). Los colores sobrios, decía, no molestaban a sus ojos enfermos ni le distraían de sus pensamientos. Era su cueva.
Durante la visita, no está permitido entrar en la habitación; se debe quedar una afuera, detrás del cordón que barra la entrada a la estancia y verlo todo desde el marco de la puerta.
• Exposición en el pasillo
También en esta planta, a lo largo del pasillo y las escaleras, vemos una colección de fotos y textos de escritores en relación a Sils y la Alta Engadina.
Hermann Hesse (Nobel de Literatura 1946), Thomas Mann (Nobel de Literatura 1929) y la propia Ana Frank pasaron temporadas en Sils-Maria Igual que Boris Pasternak, Nobel de Literatura 1958Quedarse en la Casa de Nietzsche
La Casa de Nietzsche es también un lugar de encuentro y estudio para artistas, escritores, profesores, estudiantes, periodistas y demás personas interesadas en filosofía, literatura y cultura en general. Para ello, se ofrece alojamiento modesto para estancias de un mínimo de 3 noches hasta un máximo de 3 semanas.
A disposición exclusivamente de los residentes queda la magníficamente surtida biblioteca de la Casa que, especializada en Nietzsche, ofrece en la actualidad algo más de 4500 volúmenes.
La bibliotecaOtros eventos
* Cada año, el último fin de semana de septiembre, se celebra un coloquio dedicado al filósofo (Nietzsche Colloquium);
* Además de las exposiciones permanentes, la Casa Nietzsche ofrece su espacio a artistas cuya obra esté relacionada bien con el filósofo bien con la región.
Parte de una de las exposiciones en el momento de mi visitaCómo llegar a Sils-Maria:
En primer lugar, hay que llegar a St Moritz (en tren, es facilísimo desde cualquier lugar de Suiza). Una vez allí, justo delante de la estación, se encuentran los autobuses que llevan a Sils-Maria.
Horarios y precios de entrada de la Casa de Nietzsche:
La Casa está abierta del 16 de junio al 20 de octubre de 2019 y del 15 de diciembre de 2019 al 13 de abril de 2010, en horario de martes a domingo, de 15:00 h a 18:00 h (cierra los lunes).
Entrada adulto: 8 francos; entrada estudiantes (a partir de 12 años): 4 francos.
¹ En Turín, el 3 de enero de 1889, Friedrich Nietzsche salió de la puerta número 6 de la Via Carlo Alberto, tal vez a pasear, tal vez para ir a recoger su correo. No lejos de allí, un cochero estaba teniendo problemas con su caballo que, a pesar de su insistencia, rechazaba moverse, y al que comienza a azotar. Nietzsche apareció entre la multitud y puso fin a la brutal escena del cochero lanzándose al cuello del caballo, abrazándolo y sollozando. Su vecino se lo llevó a casa donde se recostó en silencio en un diván durante dos días hasta que dijo sus últimas palabras: «Madre, soy un estúpido».
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