Estas recomendaciones te ayudarán a identificar si en realidad tienes algún trastorno del pánico. A veces no tienes ni idea de que puedes estar sufriendo algún trastorno del pánico y sin embargo los padeces.
Esto es un indicativo de que tienes que cambiar algo en tus conductas cotidianas.
A veces tan solo es descansar mejor, a veces es por la manera de procesar las responsabilidades del día a día, y otras veces tienes un problema mayor que resolver.
De todas maneras es necesario actuar de inmediato y corregir el causante de un trastorno del pánico.
Los síntomas que pueden desvelar y sacar a la luz tus trastornos del pánico son los siguientes:
- Te duele la cabeza muy frecuentemente de manera agobiante y agobiante.
- Tienes sensaciones de miedo repentinas y sin motivo aparente.
- Sientes extrañeza o desorientación en lugares conocidos.
- Tienes la sensación de tomar conciencia de dónde estás en múltiples ocasiones consecutiva.
- De repente te da miedo hacer alguna acción cotidiana que antes hacías sin pensar.
- Tienes miedo de sentir miedo pero no sabes qué te lo produce.
- Le tienes mucho miedo a la muerte.
- Te preocupas obsesivamente de cosas insignificantes y tienes temor a que no se cumplan.
- Ordenas las cosas meticulosamente y a tu manera. Así sientes un alivio y una sensación de seguridad.
- Te auto observas constantemente pensando que actúas extrañamente.
Estas son sólo algunas de las muchas situaciones que pueden estar apuntando a que tienes algún trastorno del pánico.
A lo mejor no es así, pero nunca está de más hacerse un auto análisis para descubrir si todo funciona correctamente en tu persona.
Si tienes alguna de estas reacciones no sería mala idea que:
1. Investigases más a fondo sobre el tema de la ansiedad y sus causas. Siempre tendrás una visión más clara de lo que te ocurre al barajar otras posibilidades.
Recuerda que mucha gente ignora la ansiedad hasta que de repente le sorprende un ataque de pánico. Esto se puede evitar si identificas alguna de estos síntomas y previenes contra ello.
2. Haz una reflexión de qué puede estar ocasionando estas situaciones. A lo mejor cambiando alguna conducta en tu vida cotidiana, como hacer más ejercicio o relajarte de vez en cuando, puede evitar algún trastorno del pánico en el futuro.
No siempre es necesario caer en una crisis para hacer algo al respecto.
Siempre es mejor prevenir que curar… y más en un trastorno del pánico.
Cuida tu cuerpo y él te devolverá el favor.
DiegoCG