Trastorno del Pánico en un Ser Querido.

¿Por qué hace un año no sabías ni si quiera lo que significaba un trastorno del pánico y ahora buscas información sobre este tema?

La respuesta es evidente, estás padeciendo un trastorno del pánico. Aunque no sea propio, padecerlo como espectador en tu marido, en tu esposa, en un familiar o en un amigo es algo que merece la pena estudiar con detalle.

La buena información sobre un trastorno del pánico es muy valiosa para combatirlo, puede que tengas mucha influencia positiva sobre quien lo está padeciendo si posees el conocimiento adecuado.

Tienes que saber que quien empieza a sufrir un trastorno de pánico por primera vez está muy asustado y se siente totalmente incomprendido. No ayuda en nada que intentes hacerle creer que no le pasa nada  o que se lo está imaginando el solo. Esto lo distanciará de ti, perderá la confianza en hablarte y potenciará el efecto de miedo y de sentirse  incomprendido.

Te aseguro que si usas algunas técnicas sencillas para apoyar a tu ser querido en su trastorno del pánico vas a lograr calmar su ansiedad y pronto te reconocerá como su aliado.

Ahí van algunas maneras probadas de actuar efectivamente:

Es muy buena estrategia hablar con confianza y hacerle notar que estás ahí para escuchar y razonar todo lo que te diga. Déjale hablar y presta mucha atención a lo que dice, luego con mucha convicción contesta con un dialogo comprensivo y directo.

Si dudas en lo que dices estarás apoyando su incertidumbre. No necesita saber que tiene que calmarse, eso ya lo sabe. Es más fácil intentar preguntar con una actitud  de intriga cosas más avanzadas para que pueda desahogarse en contarlas y sacar fuera los temores.

Por ejemplo una buena pregunta sería:

¿Cómo sabes cuando tienes un trastorno del pánico?

Él te explicará  los síntomas típicos de miedo irracional, incertidumbre, pensamientos extraños, sudores, taquicardias…

A esto le puedes contestar que has leído que en muchos casos es así pero que estos efectos tienen normalmente una duración de 10 a 15 minutos en su intensidad más alta (los denominados ataques de ansiedad). Y que físicamente no provocan infartos, daños irreversibles o muerte.

Ya me entiendes, la cuestión es conversar de tú a tú sin que él pueda sentirse desplazado e incomprendido.

También puedes animarle y ayudarle a buscar información para poder seguir charlando del tema con conocimiento compartido.

Espero que te sirva! Comparte tus preguntas, comentarios o vivencias.

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DiegoCG