El artículo Tratamientos con Aceites Esenciales para Invierno aparece en consejos
Los aceites esenciales ofrecen muchas propiedades distintas, y algunos de ellos cuentan con indicaciones específicas para tratar patologías típicas del invierno, como las infecciones virales causantes de la gripe y resfriados y patologías bacterianas, respetando la flora microbiana propia y beneficiosa para el organismo.
Una característica muy apreciada en los aceites esenciales es que actúan en el organismo de forma global, contribuyendo a reforzar todos los sistemas y a estimular las defensas naturales.
Los aceites esenciales ricos en alcoholes terpénicos y óxidos terpénicos son los más interesantes en el invierno, por sus propiedades anticatarrales y antivirales excepcionales. Para las infecciones más importantes se recurre a aceites esenciales ricos en fenoles, moléculas que destacan por su poder antiinfeccioso de amplio espectro.
Aceite de Árbol de Té (Melaleuca alternifolia)
El aceite esencial de árbol del té es uno de los aceites más conocidos y más utilizados en medicina aromática. Es antibacteriano, antiviral e inmunoestimulante.
Es muy útil en invierno para combatir cualquier tipo de infección que afecte a las vías respiratorias, solo o en combinación sinérgica con otros aceites esenciales.
Está indicado para el tratamiento de la otitis, sinusitis, las anginas, rinofaringitis y gripe.
Normalmente se administra por vía tópica (cutánea), aunque en algunos casos, y bajo supervisión médica, puede administrarse por vía oral.
Cíprés (Cupressus sempervirens)
El aceite esencial de ciprés es especialmente eficaz para aliviar la tos seca.
Se puede administrar vía aérea, con difusores de esencias, y por vía tópica.
Está desaconsejado en caso de cáncer hormono-dependiente (mama, útero, ovarios).
Orégano (origanum compactum)
El aceite esencial de orégano es de gran utilidad durante todo el año. En unas 24 horas es capaz de mejorar infecciones respiratorias y anginas. Está indicado para el tratamiento de la bronquitis, anginas, gripes, sinusitis, laringitis y traqueítis.
El inconveniente de este aceite esencial es que provoca quemazón en la piel y mucosas, por lo que se ha de utilizar en vehículos específicos, como cápsulas que contienen el aceite en las dosis adecuadas para ingerir por vía oral.
Eucalipto radiata (Eucalyptus radiata ssp radiata)
El aceite esencial de eucalipto tiene un olor es muy agradable y muy suave. Por sus propiedades anticatarrales, expectorantes, antivirales e inmunoestimulantes este aceite esencial es una ayuda muy apreciada en el invierno. Además, puede ser usado por toda la familia, incluso por los niños, y en difusión contribuye a disminuir considerablemente los riesgos de contagio, muy útil en el ambiente doméstico.
Está indicado por vía aérea, cutánea y oral para el tratamiento de infecciones respiratorias (resfriados, rinofaringitis, bronquitis, gripe, otitis, etc.)
Laurel (Laurus nobilis)
El aceite esencial de laurel es particularmente interesante para combatir la gripe por sus propiedades antiinfecciosas, anticatarrales, expectorantes y antivirales .
Está indicado por vía cutánea y oral para el tratamiento de afecciones virales.
Romero (Rosmarinus officinalis)
El aceite esencial de romero es especialmente interesante por sus propiedades mucolíticas. Se puede emplear combinado con otros aceites esenciales en caso de bronquitis y sinusitis.
Se administra por vía cutánea para el tratamiento de la sinusitis, bronquitis y congestiones pulmonares.